Según el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, este 2022 pasará a la historia como el año con más terrenos afectados por incendios de la última década, con casi 250.000 hectáreas quemadas. Casi la mitad de los incendios, por cierto, se concentran en el noroeste peninsular.
Mientras tanto y con el objetivo de evitar que volvamos a tener un año tan desafortunado en este ámbito, administraciones, empresas especializadas o centros tecnológicos recurren a la tecnología para intentar mitigar el impacto.
Y es que cualquier aliado es bueno. Hoy en día, los bomberos siguen siendo esenciales en la lucha contra el fuego, pero la innovación y la disrupción también van convirtiéndose poco a poco en un arma más en esta guerra contra uno de los elementos más devastadores de la naturaleza.
Precisamente en una de las regiones de ese noroeste peninsular tan afectado por el fuego, se está trabajando, con la ayuda del gobierno regional, en interesantes proyectos en este sentido.
Hablamos de Cantabria y de la empresa CIC (Consulting Informático de Cantabria), que este mes de septiembre ha presentado el proyecto SIGIZA, uno de los que ha recibido ayudas de la empresa pública Sodercan (Sociedad para el Desarrollo de Cantabria).
En esencia, SIGIZA persigue el desarrollo de un modelo cartográfico de riesgos dinámico y un sistema inteligente de toma de decisiones para la gestión integral de incendios y zonas afectadas.
Tendrá una inversión por parte de CIC de en torno a los 150.000 euros, cofinanciando la empresa pública Sodercan un 20%.
Ese desarrollo de un modelo cartográfico de riesgos dinámico y un sistema inteligente de analítica y procesado de información busca, a su vez, tener en cuenta todas las variables asociadas a combustión, propagación e incendios y permitiría la toma de decisiones y la coordinación de los equipos de extinción.
"La solución que se pretende desarrollar en este proyecto será un modelo dinámico que permita representar un mapa de riesgos en cada una de las teselas del área geográfica sobre el que aplique finalmente el sistema", explican desde el gobierno regional.
Este modelo será complementado con un sistema de procesado de información para la gestión y coordinación de los equipos de extinción, "con un mapa de indicadores que permita valorar los resultados conseguidos y la eficacia y la optimización de los recursos utilizados en su implementación", añaden.
CIC se encuentra desarrollando diferentes bloques software (prevención, extinción y reforestación) que, una vez integrados, darán lugar a la obtención de un prototipo demostrador que pretende ser validado en un ámbito geográfico de la región.
Por supuesto, este modelo sería escalable a cualquier otro territorio con elevado riesgo de sufrir incendios.
El producto final, con todo, va a permitir reducir la superficie arrasada. Es más, se estima que se podría reducir un tercio de la masa forestal arrasada en base al análisis de lo que sería su aplicación.
Fundada en 1990, CIC es una compañía especializada en tecnologías de la información, en el desarrollo de soluciones software e integración. Ofrece servicios de consultoría de procesos de negocio, operación y mantenimiento de red, seguridad de la información e informática, así como productos propios desarrollados.
La lucha contra incendios, lógicamente, no es su único ámbito de actuación. De hecho, esta compañía ha sido beneficiaria de otra ayuda concedida por Sodercan a otro de sus proyectos.
Vocación internacional
Se trata del proyecto PIADOCS, que cuenta con un presupuesto de más de 80.000 euros, y una aportación del 15% por parte de la entidad pública cántabra.
El objetivo general del proyecto PIADOCS es la investigación de técnicas y algoritmos basados en redes neuronales para permitir la extracción de datos desde cualquier tipo de documento con unos altos niveles de precisión, incorporando además técnicas de compresión para optimizar el almacenamiento de los datos.
CIC se encuentra desarrollando los diferentes módulos software para la configuración de los algoritmos, los elementos de integración e interoperabilidad y la interfaz de visualización para satisfacer los requerimientos de digitalización documental de cualquier organización.
El producto final va a permitir mecanizar documentos que se han recibido en un formato no estructurado, o bien directamente en papel, reduciendo el tiempo de búsqueda de información, eliminando errores humanos y automatizando la carga de datos.
El consejero de Industria e Innovación y presidente de Sodercan, Javier López Marcano, ha felicitado a CIC por su trayectoria y por ambos proyectos, que aportarán un valor añadido diferenciador en el campo de la digitalización de documentos, clave para poder automatizar tareas repetitivas en la actividad diaria de las empresas, y en el ámbito de la gestión de incendios, en el que la solución propuesta por la tecnológica cántabra permitirá una reducción significativa de la masa forestal arrasada.
El consejero ha destacado la vocación nacional e internacional de este grupo empresarial cántabro líder en el ámbito de las TIC, reconocido por su calidad de servicios, capacidad de innovación, compromiso y fiabilidad en los proyectos y productos que desarrolla.
Y es que CIC tiene su sede central en Santander, en el Parque Tecnológico de Cantabria, y otra sede en Madrid, pero sus productos y servicios están presentes en 40 países. Alcanzó en 2021 una cifra de negocio de 15 millones de euros y cuenta con más de 331 profesionales en plantilla.