Los beneficios que aporta el despliegue de la nueva tecnología móvil 5G, como son una mayor velocidad, un menor tiempo de respuesta (latencia) o la capacidad de multiplicar el número de dispositivos conectados al mismo tiempo, representan una enorme oportunidad para las empresas.
Si las generaciones anteriores de la tecnología móvil han tenido un enorme impacto en la forma en la que las personas nos comunicamos, trabajamos, estudiamos o nos entretenemos, los expertos coinciden en que la verdadera revolución del 5G se producirá en el campo de las empresas y la industria.
En este contexto, cada vez más compañías de todos los sectores están apostando por desarrollar sus propias redes privadas de tecnología móvil para lograr captar plenamente los beneficios que ofrece la nueva tecnología móvil, según constata un informe de la Asociación Global de Proveedores móviles (GSA, por sus siglas en inglés).
La organización señala que la demanda de redes privadas basadas en la tecnología LTE y, cada vez más, en 5G, está impulsada por las crecientes necesidades de las empresas y las entidades gubernamentales modernas en materia de datos, seguridad, digitalización y movilidad empresarial.
En este sentido, detalla que compañías de todo tipo están combinando sus sistemas conectados con aplicaciones de big data o analítica para transformar sus operaciones, incrementar la automatización de su actividad u ofrecer nuevos servicios a sus usuarios.
"Las redes inalámbricas con LTE o 5G permiten que estas transformaciones tengan lugar incluso en los entornos más dinámicos, remotos o altamente seguros, al mismo tiempo que ofrecen los beneficios de escala de una tecnología que está siendo desplegada en todo el mundo", afirma la GSA.
En concreto, detalla que la aparición de los sistemas LTE avanzado supuso un "cambio radical" en la capacidad y el rendimiento de la red, mientras que el 5G ha aportado una mayor densidad de las redes (capacidad para soportar un mayor número de usuarios o dispositivos) y una enorme mejor de la latencia, lo que permite el uso de tecnología móvil para aplicaciones en las que el tiempo de respuesta es un factor crítico.
Aumenta el número de redes privadas
La GSA admite que es difícil de determinar el número exacto de despliegues de redes privadas móviles que existen en la actualidad, ya que los detalles a menudo no se hacen públicos. Sin embargo, en su esfuerzo por mejorar la información que existe sobre este mercado, la asociación ha elaborado una base de datos sobre las mismas.
Unos datos que reflejan que en la actualidad se conoce que al menos 370 compañías están desplegando redes móviles privadas LTE o 5G o han recibido una licencia para el despliegue de estas. Esta cifra está por encima de las 311 que recogía el anterior informe de la asociación publicado a principios de 2021.
El análisis de los datos también señala que estas redes privadas implementadas o autorizadas se localizan en 45 países y territorios de todo el mundo. Además, también existen algunas localizadas en zonas de altamar (offshore) que prestan servicios a compañías petroleras o gasistas, así como a barcos.
En cuanto a los distintos sectores, los datos de la GSA sugieren que el manufacturero es el más avanzado en cuando a la adopción de redes privadas móviles locales, ya que ha identificado que existen hoy en día al menos 79 compañías con despliegues, proyectos piloto o licencias concedidas, frente a las 51 del anterior informe.
Entrando más en detalle en este sector, la automoción es el subsector líder en términos de inversión y adopción en lo referente a las redes móviles privadas. De hecho, representan alrededor de una cuarta parte (25,3%) de las 79 compañías identificadas en la base de datos.
El segundo sector que más apuesta a nivel global por el desarrollo de redes móviles privadas es el de la minería, seguido de otros como las empresas de servicios públicos ('utilities'), la seguridad, la defensa, las comunicaciones y las Tecnologías de la Información (TI) o el transporte ferroviario.
A este respecto, detalla que las compañías del sector de las comunicaciones o TI son "inversores clave" en el desarrollo de redes privadas móviles, pero no siempre hay datos disponibles para determinar qué tipo de red es. Aun así, estas empresas son las que más licencias tienen para redes privadas 5G o LTE tras el manufacturero.
Por tipo de red, el informe señala que los despliegues LAN (red de área local) continúan superando a los WAN (red de área amplía) y espera que esta disparidad se mantenga en el futuro, ya que hay más potenciales usuarios de redes locales más pequeñas que de redes con un alcance mayor, como regional o incluso nacional.
El 5G gana terreno al LTE
En cuanto a la tecnología empleada, LTE es usada por el 64% de las redes privadas móviles identificadas por la GSA, frente al 88% de octubre de 2020, aunque la organización muestra su sorpresa por el hecho de que el 5G ya esté desplegado o previsto en el 44% de dichas redes. El otro 8% corresponde a despliegues con las dos tecnologías.
Por otro lado, el informe también señala que el mercado de las redes móviles es el campo de juego para una gran variedad de proveedores de servicios, incluidos los vendedores de equipamiento de tecnología, los operadores de redes móviles, los integradores de sistemas y los usuarios finales, que a veces incluso se encargan de instalar y operar su propia infraestructura.
La GSA ha identificado cerca de 50 compañías que ejercen como proveedores de equipamiento para el despliegue de estas redes privadas, así como 68 operadores de red implicados en estos proyectos, lo que deja claro que "no todos los usuarios finales están rompiendo los lazos con los proveedores de servicios móviles existentes".
En este contexto, la GSA concluye que, con tantas oportunidades de negocio y tantos reguladores preparando iniciativas para habilitar espectro específico para redes de uso privados, se espera una "significativa evolución" de este mercado en los próximos dos años.