En mi anterior columna lo abordé un modo general y toca ahora profundizar más en el universo de las empresas. No sé si les pasará a ustedes, pero en cada foro o reunión a la que acudo, todos los empresarios me preguntan lo mismo: ¿Qué hacemos para acceder a los fondos europeos? ¿Estamos aún a tiempo?
El ecosistema empresarial patrio vive, como era previsible, una histeria empresarial por colocarse en primera fila antes de que se le dé el pistoletazo de salida a la carrera por conseguir financiación europea.
Resumo aquí 11 ideas/consejos que he ido escuchando y proponiendo a lo largo de estas últimas semanas.
1) Calendario: ya se han empezado a aprobar Manifestaciones de Interés (MdIs) por parte de distintos ministerios y vendrán más. La idea base es que se están identificando proyectos tractores, de gran impacto, para, posteriormente, poder ser financiados directamente. Esto no se termina ya, los ministerios irán publicando distintas MdIs a lo largo del año, y, desde mi punto de vista, es probable que también lo hagan las comunidades autónomas.
2) Grandes ámbitos de actuación: transición ecológica (40% de los fondos), industrialización inteligente y transición digital (20% de los fondos) son los tres grandes campos para las empresas. Dentro de estos tres grandes bloques se han definido hasta diez prioridades (políticas palanca) y se ha establecido un porcentaje de financiación sobre el global para cada uno de ellos. Es decir, a grandes rasgos, sabemos qué intensidad financiera va a tener cada una de esas prioridades.
3) Sectores: renovables y eficiencia energética, digitalización multisectorial, sanidad, educación e industrialización inteligente, serán, por distintos motivos, los cinco sectores estrella.
4) Pymes: la estrategia del gobierno se parece mucho a la de Europa: se está fomentando la cooperación entre empresas grandes y pymes para crear proyectos cross (lo hemos visto en los MdIs), pero más allá de trazar ese gran mapa de proyectos colaborativos y transversales, las pymes tendrán una cuota principal de protagonismo en las convocatorias directas de carácter competitivo.
5) Experiencia: las empresas que ya saben lo que es un CDTI, un ENISA o un IDAE, no notarán grandes cambios. Una parte importante de los fondos europeos se gestionará directamente a través de entidades gestoras que ya tienen una metodología de trabajo que funciona: convocatorias, análisis de proyectos y financiación de operaciones; todo un clásico, vamos.
6) Otras vías: además de los ministerios y de las principales entidades gestoras, habrá que estar atentos a lo que hacen las autonomías: están identificando grandes proyectos y los están promoviendo a nivel nacional al tiempo que están negociando un sistema de gestión que les permita ejecutar hasta un 50% de los fondos. Esto significa que igual que a través de CDTI o RED.ES, muchas agencias regionales ejecutarán fondos NGEU a través de convocatorias con impacto regional.
7) No vale la pena que diseñes un proyecto por si acaso. Hay mucho dinero, está claro, pero también habrá mucha competencia. Que tu proyecto sea transformador, que tenga parte de co-financiación privada y que se pueda ejecutar en el corto/medio plazo, son factores clave. Para conseguir financiación mañana empieza a diseñar tu proyecto hoy.
8) Crea consorcios. Cada día tengo más claro que habrá una parte de los fondos destinada a la cooperación entre empresas de distintos territorios. Los proyectos con impacto global, en una cadena de valor o entre varias regiones tendrán ese plus adicional que los hará más seleccionables.
9) Haz un plan a tres años en el que lo contemples todo: inversión, necesidades financieras y líneas de ayuda (todas). Ten en cuenta que se acaba de aprobar el Marco Financiero Plurianual de la UE para los próximos siete años, el mecanismo que financia, entre otras cosas, programas como Horizonte Europa (antiguo H2020) o EIT Digital, y que previsiblemente, ahora que todos estamos pendientes de los fondos NGEU, supondrá grandes oportunidades a medio plazo al rebajarse la tendencia inflacionista de proyectos presentados en los últimos años.
10) Si tu proyecto, empresa, idea tiene algo que ofrecer al desarrollo de lo público, házselo saber con rapidez a la Administración. Por primera vez en nuestra historia parece haber consenso sobre la necesidad de abordar grandes iniciativas de colaboración público-privada.
11) Viabilidad de las iniciativas empresariales: presentar por presentar no vale. En las últimas MdIs España ha aflorado proyectos de inversión empresarial casi por el valor total del fondo… A ver, no. ¿Qué se entiende por análisis de viabilidad nivel básico? Conectar con las prioridades de inversión del plan, contribuir a la generación de empleo, tener equilibrio presupuestario y otras vías de financiación complementarias aseguradas y ser medible.