La pandemia del coronavirus está alterando el sistema económico en todo el mundo. Las desigualdades sociales se han incrementado y cada vez más personas tienen que acudir a los bancos de alimentos para poder comer cada día. En los barrios más humildes de grandes ciudades se ven cada vez más grandes colas en estos centros de reparto de comida.
Tan sólo en Nueva York la demanda en estos centros que distribuyen alimentos a personas necesitadas ha aumentado un 100% y hasta un 200% en el condado de Westchester, justo al norte de la Gran Manzana, según los datos que dio a conocer el gobernador del estado, Andrew Cuomo.
Para mejorar la gestión de estos centros, la Universidad de Cornell ha desarrollado un nuevo algoritmo para distribuir y asignar mejor los alimentos y mejorar, además, la nutrición entre quienes acuden a esos centros.
“Con el fin de atender a miles de personas y combatir la inseguridad alimentaria, nuestro algoritmo ayuda a los bancos de alimentos a administrar sus recursos de manera más eficiente y los clientes obtienen más nutrición”, asegura el director del estudio Faisal Alkaabneh, ingeniero de sistemas en la Universidad de Cornell. Y así lo cuenta en el informe publicado en la revista Omega: Un marco unificado para una asignación de recursos eficiente, eficaz y justa por los bancos de alimentos utilizando un enfoque de programación dinámica aproximada.
En el estudio los investigadores revisaron los datos del Banco de Alimentos del Nivel Sur, que atiende a seis condados en el norte del estado de Nueva York. Allí se distribuyen casi 11 millones de comidas para 22.000 personas cada semana. El 19% de los clientes son ancianos, el 41% niños. Dos grupos de edad que necesitan un control nutricional mucho más importante.
Con la ayuda de la inteligencia artificial se puede coordinar el reparto equitativo y equilibrado de diferentes categorías de alimentos, ya sean frescos – lácteos, fruta o carne - o enlatados. El algoritmo de los investigadores puede conseguir mejorar la eficiencia en el reparto de hasta un 8%. El equilibrio nutricional de los alimentos se mejora hasta un 3%, aseguran desde Cornell
“No se trata de resolver un problema matemático, de resolver un asunto meramente económico”, señala Alkaabneh. “Un kilo de carne no es lo mismo que un kilo de pan o de fruta”. El algoritmo es mucho más complejo porque debe tener en cuenta no sólo la eficiencia del sistema, sino que debe ser equitativo y justo. El modelo matemático conseguido con IA tiene presente, además, aspectos como la seguridad alimentaria y los valores nutricionales en función de la edad a la que va dirigido el menú que se reparte.