Aunque en los últimos meses se están implementando diversas soluciones innovadoras en torno al coronavirus, sigue habiendo ciertos problemas aún no resueltos. Residencias, hoteles, restaurantes, hospitales... El interior de espacios como los citados se están convirtiendo en un auténtico quebradero de cabeza en la lucha contra la Covid.
El rápido incremento de los contagios cada vez que se flexibilizan las condiciones de uso de espacios interiores es evidente y obliga a los expertos a investigar de qué manera puede acabarse esta lacra.
En juego, al margen del objetivo primordial -el sanitario-, está la recuperación total de sectores clave para la economía como el turismo.
Y en nuestro país, hablar de turismo es hacerlo, entre otros lugares, de las islas Baleares.
Es precisamente en esta región insular donde se está desarrollando un sistema que permite avanzar con paso firme hacia la solución del problema descrito y que se basa en un trabajo de aislamiento genético a través de una PCR digital.
Un año después de que estallara la pandemia de la Covid-19, se demuestra una vez más el esfuerzo investigador de la comunidad científica. Un esfuerzo que ha permitido demostrar el riesgo que tiene para la salud la transmisión del virus a través de aerosoles respiratorios o bioaerosoles, especialmente en espacios cerrados y mal ventilados.
Estos aerosoles tienen un tamaño inferior a los cinco micrómetros, por lo que pueden permanecer en suspensión entre minutos y horas. Por ello, el control del aire en los espacios interiores concurridos es una de las vías importantes para prevenir el contagio de la enfermedad.
¿En qué consiste el sistema?
En esta línea, un equipo de investigadores de la Universidad de las Islas Baleares (UIB), el Instituto de Investigación Sanitaria de las Islas Baleares (IdISBa) y la Universidad Politécnica de Valencia trabaja, en el marco del proyecto IDEQURE, en el desarrollo de un sistema para detectar y eliminar el virus.
En la primera parte del proyecto, el grupo de investigación en Biología Molecular y Salud Global de la UIB, dirigido por el doctor Josep Mercader, junto con el grupo de investigación en Inflamación, Reparación y Cáncer en Enfermedades Respiratorias del IdISBa, al que pertenece el doctor Ernest Sala, jefe del Servicio de Neumología del Hospital Universitario son Espases, han desarrollado una metodología que permite detectar y cuantificar los niveles ambientales de SARS-CoV-2 en espacios cerrados mediante una PCR digital.
El sistema toma muestras de partículas de 1 a 5 micrómetros (cada micrómetro es una milésima parte de un milímetro) presentes en el aire, y posteriormente aísla el ARN, una biomolécula que contiene la información genética del virus.
A partir del análisis de las muestras por PCR digital se consigue determinar no sólo la presencia del virus, sino también su concentración.
Gracias a esta metodología, se puede estimar el riesgo de infección en espacios cerrados y facilitar la gestión de las tareas de desinfección.
La eficacia de esta metodología se ha analizado en las instalaciones del Hospital Universitario Son Espases (Mallorca).
¿Cómo se elimina?
De manera paralela al desarrollo de la metodología de detección llevada a cabo por los investigadores de la UIB y el IdISBa, el investigador de la Universidad Politécnica de Valencia Hermenegildo García Baldoví desarrolla un sistema de desinfección del aire de espacios cerrados.
Este sistema es un dispensador de aerosol que puede nebulizar compuestos desactivadores del virus y otros patógenos, pero que no supone ningún riesgo para la salud humana ni para el medio ambiente, con el objetivo de reducir la concentración del virus causante de la Covid-19 y el peligro de contagio.
El proyecto IDEQURE se lleva a cabo con la financiación de la IdISBa a través de la convocatoria de expresiones de interés para la financiación de proyectos Covid-19.
Lo que queda claro con proyectos como éste es que la búsqueda de soluciones que contribuyan a paliar los efectos del coronavirus es incesante en toda la comunidad científica.
En busca de más proyectos anticovid
En otra región, en este caso Madrid, la Universidad Politécnica madrileña está trabajando a un ritmo constante.
Al resto de proyectos y propuestas en los que la UPM ya lleva meses trabajando, se unen los proyectos COVID-19: COVID-x, PERISCOPE y unCoVer.
COVID-x busca acelerar soluciones que contribuyan a combatir esta pandemia mientras que PERISCOPE tiene como objetivo una mejor comprensión del virus y sus efectos a todos los niveles.
Por último, unCoVer consiste en una red de instituciones de investigación que van a recopilar datos derivados de la atención de los pacientes con Covid-19 a nivel europeo y mundial para poder luego analizarlos a distintos niveles.
Estos proyectos están enmarcados en la acción europea extraordinaria del Programa Marco de I+D+I de la UE para financiar proyectos innovadores y tecnológicos que contribuyan a combatir este virus.