Desde hace siete años la Universidad de Stanford, corazón de Silicon Valley y quizá el centro académico más centrado en emprendimiento, recolecta y analiza datos para medir cómo los latinos y sus empresas aportan a la economía de Estados Unidos. No en vano, se trata del segmento de población más creciente del país norteamericano y, también, la más exitosa en cuanto a la apertura de nuevos negocios se refiere.
Según el último censo, los latinos conforman el 19% de la población total de EE.UU. O lo que es lo mismo, 62,1 millones de personas, un 23% respecto a 2010. Y no sólo suponen una formidable base de consumidores (con un gasto de 1,85 billones de dólares), sino también de generación de empresas: un 44% más en los últimos diez años. La suma del consumo y la producción de negocios a cargo de los latinos asciende a 2,75 billones de dólares de aportación a la economía total del país.
En la edición presentada el pasado viernes en la Universidad de Stanford se corroboraron los datos y la tendencia de años previos. La muestra cuenta con 15.000 dueños de negocios de los que la mitad entran dentro de los denominados latinos y la otra mitad no. De las empresas de latinos estudiadas, el 19% estaban dentro del sector de la tecnología.
El informe hace especial hincapié en cómo han sido capaces de capear el temporal de la pandemia. Por ejemplo, se destaca la dificultad de las empresas latinas para acceder a los préstamos condonables del gobierno de Estados Unidos, cuya cuantía total fue de 800.000 millones de dólares. Eran unos fondos centrados especialmente en poder pagar nóminas de pequeñas empresas de modo que se evitase una sangría en forma de despidos.
También se realza el papel de las organizaciones de emprendedores, pues sirven de apoyo mutuo. Es el caso de las cámaras de comercio, asociaciones comerciales, think tanks y corporaciones que buscan conectar con compañías emergentes.
Uno de los puntos más interesantes del informe, y dónde se pide una mejora en forma de educación para los emprendedores, está en el uso de los datos. Se subraya que, en términos generales, estas empresas no usan tanto los datos a la hora de tomar decisiones como lo hacen las que no están comandadas por latinos.
Otro ejemplo de gestión mejorable está en lo referente a seprar finanzar personales y profesionales. “Los latinos son más propensos a usar sus ahorros personales o maximizar el crédito de sus tarjetas para capear la pandemia”, relata el informe.
Llama también la atención que las empresas de latinos tienden a tener más empleados que las de los no latinos. Sin embargo, les cuesta crear empresas cuya facturación supere los tres millones de dólares.
De acuerdo al informe, en la actualidad existen alrededor de cinco millones de negocios propiedad de latinos en EEUU. Por ponerlo en contexto, ya en 2018, aproximadamente 350.000 empresas de propiedad de latinos generaron más de 460.000 millones de dólares en ingresos anuales, empleando a 2,9 millones de personas.