Frenar el cambio climático es una labor que corresponde a todos los actores de la sociedad. Desde los gobiernos a las empresas, pasando por cada persona de forma individual. Para abordar estos retos estructurales, que tienen una relación directa con los riesgos financieros, la transición energética y el futuro de la economía mundial, Fundación Naturgy celebró, junto al IESE Business School, Energy Prospectives. Este ciclo de conferencias, referencia en el sector, contó con la participación de Martin Wolf, quien dio la clave para cumplir con los objetivos de sostenibilidad establecidos internacionalmente: la tecnología.
El reconocido periodista británico y editor adjunto del Financial Times, opinó que parar el crecimiento no es una solución ante la crisis climática y apuntó a la transformación tecnológica como la única salida, ya que está permitiendo reducir considerablemente los costes de las energías limpias y alternativas. Eso sí, subrayó que durante esta transición energética hacia una economía descarbonizada los combustibles fósiles deberán tener unos precios estables porque los seguiremos necesitando. "A medida que avanzamos hacia el nuevo sistema, los combustibles fósiles deben seguir operando y debe haber una estabilidad".
Lo más importante para Wolf es no mantenernos impasibles ante el cambio climático porque "si no hacemos nada, nos arriesgamos a un Armagedón climático". "Para poder mantener el aumento de la temperatura global a menos de 1,5ºC por encima de los niveles preindustriales, las emisiones deben reducirse un 40% para 2030", explicó.
En este sentido, el editor adjunto de Financial Times destacó también el papel relevante de la administración a nivel mundial, que debe garantizar una regulación certera; impulsar incentivos, por ejemplo, ofreciendo subsidios temporales para nuevas tecnologías o poniendo plazos para la sustitución gradual de los vehículos contaminantes; y colaborar a su vez con las empresas, que impulsarán esta transformación a través de las inversiones.
Voces por la sostenibilidad
El sector de la energía es especialmente relevante en la lucha contra el cambio climático. Por eso, cada año Energy Prospectives reúne a figuras reconocidas a nivel nacional e internacional como empresarios, reguladores, directivos y académicos, por su experiencia, visión y conocimiento del sector energético. ¿Su objetivo? Debatir de forma seria y rigurosa para "promover el uso racional de los recursos energéticos y fomentar un desarrollo sostenible".
Su octava edición fue inaugurada en Madrid el pasado 26 de octubre por el presidente de Fundación Naturgy, Rafael Villaseca, y el director general del IESE, Franz Heukamp.
Heukamp se encargó de dar la bienvenida y agradecer su presencia a los ponentes, y alabó su calidad y la importancia de su discurso por contribuir a un debate de alto nivel sobre el desarrollo de nuestra sociedad. Por su parte, Villaseca destacó la importante interrelación existente entre el sector energético, el cambio climático, el mundo financiero y económico. "A través de estas jornadas, la Fundación Naturgy, con la colaboración del IESE, pretende contribuir a una mejor comprensión del sector energético y de los diferentes desafíos y retos que presentan en el futuro desde diferentes perspectivas", manifestó.
También acudió a la cita el gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, quien coincidió con la visión de Wolf de usar la tecnología para afrontar la lucha contra el cambio climático. "El impacto del cambio climático en la economía puede ocurrir a través de varios canales diferentes que afectan a empresas y hogares y, por lo tanto, bancos", dijo Hernández de Cos. No obstante, incidió en que "los resultados muestran que los beneficios a largo plazo de la adopción temprana de políticas que impulsan la transición a una economía neutra en carbono compensan con creces los costes a corto plazo de esta transición".
Como consecuencia de ese impacto del cambio climático en la economía, el gobernador del Banco de España advirtió que también podría afectar de forma bastante directa "en la capacidad de los bancos centrales para estabilizar la inflación. Es probable que las políticas destinadas a promover la transición a una economía neutra en carbono, como los impuestos al carbono, afecten la volatilidad de la inflación general, que incluye los precios de la energía". En su opinión, para prevenir el cambio climático es necesario un enfoque holístico que involucre todas las políticas y actores.