Cuando la gestión de altos patrimonios era un negocio incipiente en España, Bankinter se situaba ya como uno de los actores más activos en este segmento. Con el valor que confiere la especialización, el banco ha construido a lo largo de las últimas décadas un referente en Banca Privada.
Lo prueban sus cifras. Este segmentó cerró 2020 con un volumen de patrimonio gestionado de 42.800 millones de euros pero ha dado un salto cuantitativo sustancial en el primer trimestre de 2021, cuando el volumen total se ha disparado un 25% con respecto a marzo de 2020, hasta alcanzar los 45.200 millones de euros.
¿Cuál es la clave que ha llevado al éxito en este ámbito? En realidad, se trata de la mezcla de dos factores predominantes. El primero de ellos es una propuesta de valor muy diferenciada del resto del sector, pero que no sería eficaz sin el segundo: el servicio volcado en el cliente que ofrece Banca Privada.
Acompañar al cliente desde que cruza el umbral, físico u online, de Bankinter es una máxima que preside todas las acciones que desempeña un equipo de alta profesionalidad como es el de Banca Privada. Un total de 50 centros específicos de Banca Privada en los principales núcleos territoriales, más de 200 banqueros especializados trabajan con la coordinación de un reloj. A ello se suma el refuerzo que suponen los casi 400 agentes de Bankinter que también desarrollan actividades de gestión de altos patrimonios bajo el paraguas del banco.
No solo el equipo supone una cualidad diferencial de Bankinter. La oferta de inversión que propone el banco entraña un alto nivel de innovación dentro del actual panorama en el sector financiero.
En este marco, los altos patrimonios pueden elegir y combinar la amplia gama de servicios del banco en este ámbito que pivotan bajo un mismo eje: la gestión integral del patrimonio con propuestas de inversión basadas en el perfil del cliente. Para ello, el banco se apoya en el análisis exhaustivo del mercado y las recomendaciones que realiza Bankinter Gestión de Activos, su gestora, en primera línea en el mercado de fondos de inversión.
En un momento como el actual, la unidad de Servicios inmobiliarios cobra relevancia. Se encarga de asesorar en la compraventa de activos de diverso tipo dentro de este sector, desde residencial a terciario, pasando por hotelero y logístico, entre otros.
La joya de la corona: inversión alternativa
En un entorno de escaso rendimiento en la opción de ahorro tradicional, el reto se ha centrado en los últimos años en desarrollar alternativas de inversión que maximicen la rentabilidad, siempre con el foco fijado en la preservación del patrimonio. La oferta que nace de esta característica es la más innovadora dentro de la Banca Privada del mercado español.
De la mano de Bankinter Investment, el área de Banca de Invesióin de Bankinter; Banca Privada ha puesto a disposición de sus clientes de altos patrimonios una amplia lista de vehículos de inversión.
Este año Bankinter lanzará una nueva Socimi que invierte en activos logísticos. El origen de este nuevo vehículo de inversión alternativa para clientes de Banca Privada del banco es la compra de la plataforma de activos logísticos Montepino, recientemente cerrada. Los activos de la nueva Socimi tendrán un valor de 1.200 millones de euros.
En 2020, también se lanzaron otros vehículos. Se pusieron en marcha la IV edición del fondo de capital riesgo Helia Renovables, que invierte en un sector clave para la sostenibilidad, tras su lanzamiento en 2017. Además, se constituyó Rhea Secondaries, fondo de fondos de capital riesgo que invierte en mercados secundarios de Europa, en colaboración con Access Capital Partners.
A ello se une la Socimi Atom, que desarrolla inversiones en activos hoteleros y cotiza desde 2018 en el MAB, ahora BME Growth, así como la Socimi Ores, junto a su versión para el mercado portugués (Ores Portugal), centrada en la adquisición y gestión de activos inmobiliarios de tipo comercial y cotizada desde 2017.
Pero también se creó en 2018 un vehículo muy innovador como fue el fondo de capital riesgo VStudent Aulis, que tiene su foco en las oportunidades de adquisición de suelo, para su posterior desarrollo y gestión en el segmento de residencias de estudiantes.
Igualmente innovador ha sido MVB Fund, que se lanzó en 2019 de la mano de Martin Varsavsky e invierte en compañías tecnológicas de Sillicon Valley en el punto de expansión, mucho antes de convertirse en grandes referentes, lo que permite atesorar el potencial de la evolución ascedente de dicha inversión. Asimismo, en 2019 se fraguó el fondo Titán, focalizado en infraestructuras en el norte de Europa.
Pero también existen alternativas de inversión que no son fondos o socimis, como es la participación en inversiones en operaciones singulares en el sector inmobiliario a través de adquisiciones de activos trofeo, como fue el edificio de Puerta del Sol, 11; Plaza Cataluña 23 (Barcelona) o el local comercial localizado en calle Serrano 53 (Madrid). La idea es seguir avanzando en la creación de nuevas opciones de inversión alternativa.
A la vanguardia en innovación y sostenibilidad
Toda la actividad que lleva a cabo Banca Privada la realiza sobre la base de la innovación digital que siempre ha marcado la estrategia general de Bankinter. Los canales digitales han sido, ya en época de prepandemia, esenciales en la interacciones habituales con los clientes y en el último año se han reforzado para estrechar la cercanía con ellos.
En otro ámbito innovador, como es la Sostenibilidad, Bankinter Banca Privada está inmerso, asimismo, en las líneas que marca el Plan Estratégico de Sostenibilidad del banco, aspectos transversales que buscan, entre otros objetivos, intensificar las opciones de inversión verdes, especialmente, en el ámbito de los fondos de inversión.