En España hay varios sitios donde se conservan murallas romanas que son testigo de la presencia y la influencia del Imperio romano en lo que esta civilización denominó Hispania. Es el caso de la muralla de Lugo, considerada como la mejor conservada del mundo, la Astorga, la de Cáceres, la de León, la de Zaragoza o la de Tarragona.
Más allá de la de Lugo, cabe destacar otra muralla de Hispania, como es la última mencionada: la de Tarragona, una estructura que forma parte de un conjunto monumental declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
Muralla de Tarragona
Se trata de una cerca militar de origen romano que rodea el casco antiguo y que es uno de los lugares que integran el sitio Patrimonio de la Humanidad denominado "Conjunto arqueológico de Tarraco".
La muralla está considerada como la construcción más antigua de la Tarraco romana. En un primer momento se trataba de una simple empalizada de madera que tenía como misión proteger a la guarnición militar. Se considera que se construyó a finales del siglo III a.C., si bien es cierto que los expertos no tienen muy clara la fecha en concreto. De hecho, se duda si fue durante la segunda guerra púnica o después de este conflicto.
[Este puente romano es uno de los más antiguos del mundo: está en España y tiene casi mil años]
Según indican desde Tarragona Turismo, esta muralla romana propiamente entendida como tal habría sido construido en el siglo II a.C., sustituyendo a la simple empalizada de madera. Momento en el que Tarraco dotó ya de una gran estructura defensiva al perímetro urbano.
En aquella época, la longitud de la muralla habría sido de unos 3.500 metros. Sin embargo, actualmente se conservan 1.100 metros, que son los que circundan el casco antiguo. Tarragona Turismo indica que entre los siglos XVI y XVII se reforzaron zonas de la muralla, concretamente, los bastiones, la falsa braga y los fortines exteriores.
En la actualidad, el Paseo Arqueológico circula entre la muralla romana y la falsa braga moderna, entre jardines, poesías románticas y explicaciones históricas. Destacan la Torre del Arzobispo, con notables reformas medievales, y la de Minerva, que contiene la escultura y la inscripción romanas más antiguas de la Península Ibérica.
Si la muralla romana de Lugo tiene el título de la mejor conservada del mundo, la de Tarraco está considerada como la construcción arquitectónica romana más antigua de todas las que se conservan fuera de Italia.
Cabe destacar que la muralla romana de Tarraco forma parte de un conjunto monumental que fue declarado Patrimonio Mundial por la UNESCO en el año 2000. La importancia de esta ciudad romana es clave, teniendo en cuenta que es el primer y más antiguo asentamiento romano en la Península Ibérica y capital de la provincia de la Hispania Citerior a partir del reinado de Augusto.
En este sentido, la huella romana en Tarragona es de gran importancia. Si deseas conocer todos los monumentos de época romana que se conservan más allá de la muralla romana, no puedes dejar de visitar los tres edificios destinados al espectáculo: el teatro, el circo y el anfiteatro, la construcción más icónica.
También en la parte alta de la ciudad de Tarragona, alrededor del año 73 d.C., se construyó el Foro o Forum provincial con el objetivo de dirigir la provincia desde el punto de vista político y económico. Otro de los monumentos conservados de Tarraco es el acueducto que recibe el nombre de Pont del Diable (Puente del Diablo en castellano).