La planta venenosa que los romanos escondieron en huesos de cabra: medicinal pero causaba "locura"
El beleño negro crece entre la maleza y era usada para tratar múltiples enfermedades a pesar de sus alucinógenos efectos secundarios.
8 febrero, 2024 13:31Un equipo de arqueólogos se encontraba excavando en la localidad neerlandesa de Houten, en la provincia de Utrecht, cuando encontraron en 2017 los restos de un fémur de cabra u oveja que había sido tallado y ahuecado para almacenar en su interior semillas de beleño negro (Hyoscyamus Niger), una planta venenosa de la familia de las solanáceas. Conocida por sus potentes efectos alucinógenos, figuraba en la Edad Media como una de las plantas utilizadas por hechiceros y brujas para invocar la lluvia, al demonio o a piezas de caza.
El registro más antiguo del beleño negro en yacimientos arqueológicos europeos data del año 5500 a.C. Pese a esto, es difícil determinar si la presencia de esta planta es intencionada o accidental ya que crece entre la maleza y está catalogada como especie silvestre. "El beleño negro presenta problemas para la interpretación arqueobotánica, ya que podría encontrarse de forma natural en la mayoría de los sitios arqueológicos donde se ha encontrado", explica Maaike Groot, zooarqueóloga de la Universidad Libre de Berlín y principal autora del reciente
Sin embargo, el yacimiento de Houten-castellum, que en época romana fue un asentamiento rural del Imperio romano, es el primero en el que se tienen evidencias claras de su uso en el periodo en la que la Urbs controlaba los modernos Países Bajos. Primero se pensó que fue utilizado a modo de pipa, pero no existían muestras de haber sido quemada. Ahora, Groot y su equipo concluyen en un estudio publicado en la revista Antiquity que hace casi 2.000 años alguien utilizó el trozo de hueso ahuecado como recipiente para almacenar cientos de semillas de esta planta venenosa.
Uso medicinal
En su trabajo, los arqueólogos detallan que las semillas fueron colocadas de forma intencionada dentro del hueso de 7,2 centímetros de largo. Para garantizar que no se perdiesen, alguien había sellado el recipiente con un tapón hecho de corteza de abedul negro. En el mismo pozo lleno de fango en el que apareció el estuche se encontraron varios fragmentos de cerámica y los restos de un broche de alambre datados entre los años 70 y 100 d.C.
El uso de esta planta es conocido gracias a la numerosa literatura grecorromana que habla de sus efectos y usos. En el siglo I d.C, el historiador Plutarco mencionó que había quien la usaba como droga para fines recreativos, aunque no solía ser lo más habitual.
Algunos autores clásicos como el médico Dioscórides informan en sus obras que sus semillas podían convertirse en una pulpa para despejar mucosidad, calmar dolores y trastornos del útero. Sus hojas hervidas podían hacer de analgésico y ayudar a bajar la fiebre, pero matiza que si se hervían junto a varias verduras podían causar enormes perturbaciones en todos los sentidos.
El escritor y militar Plinio el Viejo dejó escrito que masticar su raíz mezclada con vinagre era un remedio útil para el terrible dolor de muelas, pero advirtió de que si el jugo se vertía en los oídos afectaba al cerebro y causaba "locura y vértigo". Por su parte, el rey Atalo II de Pérgamo (siglos III- II a.C.) señala que su uso podía derivar en graves perturbaciones como "enajenación de la mente o locura" y que "ponen a los hombres fuera de sí".
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Este último hallazgo en los remotos Países Bajos, muy cerca de la antigua militarizada frontera establecida en el río Rin, "indicaría que las prácticas romanas se extendieron incluso a las comunidades rurales de la periferia del Imperio", explica Groot. Este hallazgo es el primer caso conocido de semillas almacenadas deliberadamente para su uso posterior.
"Nuestro estudio contribuye a la discusión sobre cómo distinguir entre una maleza que termina naturalmente en conjuntos arqueobotánicos y una planta utilizada intencionalmente por la gente", resalta el investigador. "Sostenemos que los futuros hallazgos de beleño negro deberían estudiarse teniendo en cuenta el contexto del hallazgo y su relación con otras plantas medicinales".