Estos son todos los territorios que conquistó el Imperio español en su máximo esplendor

A lo largo de la historia, España ha vivido numerosos acontecimientos que definen la historia contemporánea de nuestros días y de los que tiene un papel clave el Imperio español. Una parte de la población sigue recordando las tierras que el país conquistó en su etapa de mayor esplendor.

Por ello, es de sobra conocido el Imperio español, donde predominaba la monarquía y la política de expansión para anexionarse territorios que estaban sometidos a la realeza por medio de alianzas matrimoniales y acciones de conquista atlánticas.

El sueño de crear un imperio global y católico estaba integrado en una sociedad que vivía en jerarquías, cuyo estado socioeconómico dependía de su origen étnico. Mientras tanto, la Iglesia tenía un papel importante en la evangelización de los territorios anexionados tras las conquistas.

Fernando de Aragón e Isabel de Castilla, los Reyes Católicos, en una pintura anónima del siglo XV.

La lucha contra el protestantismo en los territorios europeos fue clave en la política que estableció la Iglesia católica. En este sentido, el Imperio se sostenía gracias a la actividad agrícola y la explotación de los recursos que se iban guardando de las colonias. Además, estos se destinaban a la financiación de los conflictos bélicos en los que España estaba inmersa para expandir el Imperio.

Mientras, en la Europa de entonces, el oro y la plata revolucionaron la economía. Un enriquecimiento que España no notó porque destinó los recursos obtenidos a mantener la Corte. ¿Recuerdas cuándo comenzó el Imperio español? Este fue el conjunto de territorios que administraba la corona española.

¿Cuándo empezó el Imperio español?

El Imperio español comprende los siglos XVI y XIX, en los que el imperio alcanzó su apogeo con los reinados de Felipe II y Felipe IV de Habsburgo. Sin duda, en esta época España se anexionaba territorios coloniales con la misma jerarquía que la que tenían el resto de lugares de la Península.

Como hemos mencionado, la política expansionista de los Reyes Católicos, Isabel de Castilla y Fernando de Aragón, conformó una gran unión de territorios que poseían la monarquía que empezaba por la unificación de los reinos de Castilla y Aragón y siguió tanto en la casa de los Habsburgo como en los Borbones.

Estos territorios pasaron a denominarse 'colonias' con la llegada de la dinastía de los Borbones a la monarquía española. El siglo XVIII estuvo en manos de Felipe V (1700-1724 y 1724-1746), Luis I (1724), Fernando VI (1746-1759), Carlos III (1759-1788) y Carlos IV (1788-1808) con el objetivo de que España ocupara un lugar destacado entre el resto de potencias europeas.

La España del siglo XVIII emprendió una búsqueda de alianzas comerciales que se quería anexionar al reino. Los Reyes Católicos empezaron a explorar el Atlántico y se comenzó a una nueva era en el país tras la llegada de Cristóbal Colón a América en 1492.

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Así, España colonizó y sometió a los pueblos indígenas mientras explotaba los recursos naturales en grandes dimensiones. El Imperio alcanzó su máxima extensión en 1580 con el reinado de Felipe II, después de la unión dinástica de la corona de España y Portugal.

El reino de España era poderoso. Con los Borbones llegó a tener colonias en Europa, África, Asia y América en 1810. En ese momento, llegó a tener 68 millones de habitantes, que suponían el 12,3% de la población mundial.

¿Cuándo terminó el Imperio español?

Debido a diferentes conflictos territoriales, el Imperio español perdió colonias en el siglo XVII. De hecho, la Guerra de los Treinta Años implicó la pérdida de Portugal en 1640 y las Provincias Unidas de los Países Bajos en 1648.

Inglaterra, Francia, Holanda y Portugal fueron avanzando para conquistar regiones de América. Una acción que la monarquía de los Borbones no supo evitar a pesar de las nuevas medidas que fue imponiendo.

'Vista de la ciudad de Sevilla', un lienzo de finales del siglo XVI atribuido a Alonso Sánchez Coello. Museo del Prado

La invasión de Napoleón Bonaparte en territorios españoles propició que varias colonias en América se fueran independizando en el siglo XIX. Así, en 1824 el Imperio español ya no tenía territorios americanos, tanto solo quedaban el puerto de El Callao (Perú), Cuba y Puerto Rico, que también perdió España.

1898 se establece como el año en el que finalizó Imperio español. El 3 de julio de 1898, después del fracaso español frente a Estados Unidos, Cuba declaró su independencia. Un hecho que supuso que Puerto Rico pasara a formar parte de EE. UU., al igual que las islas Filipinas y Guam, que fueron denominadas como protectorados de Estados Unidos. 

Los territorios que conquistó el Imperio español

A finales del siglo XVIII, el Imperio español albergaba 20 millones de kilómetros cuadrados. A través de las expediciones fuera del continente, se anexionó territorios de América. Se trata de los territorios del actual México y parte de Estados Unidos, zonas de la actual Perú, Colombia, Argentina, Ecuador, Panamá, Chile, Bolivia, Paraguay, Uruguay, Las Galápagos, parte de Brasil y de Venezuela.

Además, tenía el control de colonias de la actual Panamá, Colombia, Ecuador, Venezuela, Islas Galápagos y el norte de Brasil y oeste de Guyana. También poseía zonas en Argentina, Uruguay, Bolivia, Paraguay y parte de Brasil y territorios insulares en el mar Caribe.

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La expansión colonial alcanzó Filipinas y el norte de Taiwán e Indonesia, así como territorios de Mascate (Omán) y Qeshm (Irán). Asimismo, el Imperio español se hizo con Mozambique, Angola, Cabo Verde, Somalia, Guinea-Bisáu, Tetúan, Casablanca, Santo Tomé y Príncipe, Cabo Juby, Melilla, Isla de Limacos, Isla de Alborán, Islas Alhucemas, Islas Chafarinas, Ceuta, Marruecos, incluido el Sáhara, Tánger, Cazaza, La Mamora y las Azores.

En Europa, tenía el control de la Península, las actuales islas Baleares, Portugal, Nápoles, Sicilia, Cerdeña, Malta, partes de la Toscana o Milán. Además de zonas de Italia, Francia también perdió los territorios de Rosellón, Charolais, el País Vasco francés, Niza, Livia y Gibraltar (actualmente de Reino Unido). Por último, de Oceanía, el Imperio español se adhirió la Isla de Pascua, las islas Marianas, las islas Carolinas, las Islas Santa Cruz (Salomón), Vanuatu, Tahití y Nueva Guinea.