Cuándo: Martes 23 de marzo 
 
Hora: 16.30 
 
 
El sector financiero está sometido a un cambio en las formas de uso de sus clientes. La oficina ya no es demandada por la mayor parte de la clientela, mientras que las apps son cada vez más empleadas para llevar a cabo el día a día de la operativa. 
 
Un cambio que está provocando un cierre masivo de oficinas y que obliga, al mismo tiempo, a los bancos a buscar nuevas fórmulas de relación con su cliente. Operadores virtuales, videollamadas, asistentes de voz... Son cada vez más las opciones que se ponen a disposición de la clientela para intentar satisfacer sus necesidades sin perder el nivel de oferta y asistencia ofrecido hasta ahora. 
 
No sólo eso. Con la pandemia el uso del dinero en efectivo está disminuyendo y se incrementa el pago electrónico. Esto ha obligado a los bancos a buscar fórmulas de pago en lugares hasta ahora impensables: desde los cepillos de la Iglesia hasta los tiovivos de los centros comerciales. 
 
Hablamos de una transformación que se ha acelerado con la pandemia y que está provocando también que los nuevos actores digitales estén aprovechando su oportunidad para situarse en la parrilla de salida de la oferta de productos financieros.