El sistema eléctrico de Canarias, como archipiélago de ultramar, es más complejo que el peninsular. Se trata de seis sistemas a repartir entre ocho islas y por tanto, son más vulnerables y con unas necesidades de inversión y refuerzo mayores. Además, prevé adelantar los objetivos en generación renovable del resto del país y sobre todo en autoconsumo. En 2030 se espera que el 35% de las familias dispongan de autoconsumo en sus casas y hasta el 70% de los edificios públicos.
"REE es clave en Canarias como operador de transporte de la electricidad", ha dicho Beatriz Corredor, presidenta de Red Eléctrica de España durante el Foro Económico 'Canarias tras la Covid-19', que se celebra entre el 17 y el 18 de mayo y que organizan EL ESPAÑOL, Invertia y Diario de Avisos.
"Somos la columna vertebral y nuestro compromiso es profundo con el territorio canario porque por sus condiciones extrapeninsulares, ya que no puede conectarse con un cable con la península".
El territorio insular cuenta con seis sistemas eléctricos conectados entre islas y por eso, "debe ser sostenible no solo económicamente sino ambientalmente". La responsable de REE ha asegurado que "en los últimos diez años hemos invertido unos 450 millones para reforzar las redes, y están en curso otros 500 millones".
Y además, "en el Plan Estratégico de los próximos cinco años se ha incluido otra partida de 700 millones sin contar con los 411 millones que se destinará a la gran pila de Canarias que es la central hidroeléctrica de bombeo Chira-Soria".
Canarias tras la Covid-19 / 6. Conversación con José Antonio Valbuena y Beatriz Corredor
Objetivos renovables
"La capacidad renovable en las islas es brutal y por tanto, en el PNIEC los objetivos son diferentes y más ambiciosos", añade Corredor. En 2030, se espera el 58% de capacidad renovable en el mix y alcanzar la neutralidad climática en 2040.
"Estamos comprometidos a que se consolide esa transición energética".
Precisamente ese cambio de modelo energético "era un diálogo que había quedado ocultado por la pandemia", ha dicho por su parte José Antonio Valbuena, consejero de Transición Ecológica, Lucha contra el Cambio Climático y Planificación Territorial del Gobierno de Canarias.
"Está claro que la prioridad era otra pero las administraciones seguíamos trabajando en la lucha contra el cambio climático".
Y esa lucha para un territorio como las islas es fundamental. "Quiero emplear el símil de un ejército que está enfrentándose a esa amenaza climática y nosotros somos el pelotón. Es decir, seremos los primeros en caer si no luchamos y alcanzamos el éxito. El territorio canario tiene unas debilidades que no tiene la península. Somos absolutamente frágiles por nuestra singularidad".
Por eso, asegura que "Canarias tiene que adelantar 10 años los objetivos españoles. Perderíamos la batalla si no lo hacemos. Y el papel de REE es fundamental".
En ese camino, hay dos pilares fundamentales: la democratización de la energía, es decir, que más del 50% de la energía que se consuma provenga de fuentes renovables de autoabastecimiento, y dotar de inteligencia al sistema.
Para la primera pata, "tenemos que tener la capacidad de generar y almacenar el 70% de la energía que necesitan los edificios públicos (tanto estatales, como autonómicos y locales) y llegar al 35% de los edificios residenciales en 2030", ha dicho Valbuena.
"Y todo ello además servirá para aportar al sistema" cuando haya excedentes.
Red inteligente
El objetivo es que los consumidores sepan gestionar de la manera más óptima y eficiente su electricidad. "Y REE tendrá un plus, no solo es garantía del sistema sino de la inteligencia en su operación". Además, el consejero propone que "Canarias sea un laboratorio y que demuestre que la transición energética es posible".
"Es verdad que tenemos un coste energético más alto pero no necesitamos una gran demanda eléctrica en calefacción ni contamos con industria electrointensiva, así que en cómputo total, por superficie y población, no es una diferencia tan elevada".
"No tenemos que diseñar una solución para toda Canarias, porque cada isla tiene sus propias singularidades".
Interconexiones
Por último, las interconexiones serán el siguiente capítulo a conseguir por parte de los responsables políticos. "La interconexión es nuestra debilidad", continúa, "geográficamente somos 8 islas, pero 6 energéticas, y queremos reducirlas a 5 en breve".
Eso supone la unión entre Tenerife y la Gomera. "Y quizás, en unos años, podamos unir Gran Canaria y Tenerife y terminar con ese pique entre provincias, que sean los cables quienes nos unan".
Para todos estos proyectos, el archipiélago también aspira a conseguir ayudas de los Fondos de Recuperación. "Hemos solicitado 466 millones a los NextGeneration para impulsar la energía sostenible y el autoabastecimiento para edificios públicos especialmente".
A partir ahí, "con los alrededor de 300 millones de euros de ahorro en los recibos de la luz en la Administración pública gracias a que pueden generar y almacenar su propia energía, habrá un efecto multiplicador",
"Lo invertiremos para que, al menos, el 35% de los hogares canarios también puedan tener sus propias instalaciones de autoconsumo", ha concluido.