El juez titular del Juzgado de Instrucción número 3 de Teruel ha propuesto mandar a juicio a Carlos Aranda, exconcejal en el Ayuntamiento de la capital turolense, por un supuesto delito de agresión sexual. Los hechos habrían ocurrido durante la madrugada del 19 de febrero de 2023 y la supuesta víctima es un joven de 20 años.
Así consta en un reciente auto, fechado el pasado 2 de marzo, que señala que, tras la investigación de los hechos, "queda acreditado que el investigado, con su conducta, pudo haber perpetrado un delito de agresión sexual" sobre una víctima "especialmente vulnerable", debido al "estado etílico en que se encontraba".
Ahora, será el Ministerio Fiscal y la defensa de la supuesta víctima los que deben solicitar al Juzgado la apertura de juicio oral contra Aranda en un plazo de 10 días.
El auto señala que, indiciariamente, el día de los hechos, el investigado "sostuvo una actuación sexualmente agresiva respecto a [omitido], de 20 años de edad, a quien engañó para mantener relaciones sexuales no consentidas".
El juez instructor también subraya que el exconcejal se habría aprovechado de que la víctima estaba borracha —así como de su edad— y le habría empujado contra una cama para efectuar "tocamientos no consentidos", hasta que la víctima, tras pedirle un vaso de agua, logró huir de la vivienda.
"[Todo ello], pese a la insistencia y requerimientos del presunto agresor, quien salió detrás de él y no paró de llamarlo telefónicamente, incluso en presencia de los agentes del Cuerpo Nacional de Policía actuantes", indica el auto.
Asimismo, el magistrado Jerónimo Cano señala que el testimonio de la víctima fue el mismo tanto en la comisaría como en el Juzgado. Y que existen mensajes de WhatsApp "que acreditan las intenciones del investigado durante el devenir de los hechos".
También existe un informe psicológico, que considera "coherente" lo narrado por el joven. Las cámaras de seguridad de la zona cercana al domicilio también acreditan lo sucedido. "Eso es, que el investigado se prevalió del estado etílico en que se encontraba el perjudicado y que este último, tras la agresión sexual y llevarse un gran susto gratuito, bajó raudo y veloz las escaleras de la vivienda, continuando la carrera cuando salió a la calle", relata el magistrado.
Además, según consta en el auto, fueron "manifiestas" las "contradicciones" del exconcejal al ser detenido, "de las que tuvo que retractarse en el acto". Tal y como relata el juez, en una segunda declaración judicial, solicitada por el investigado, éste "no pudo precisar las insinuaciones o provocaciones" que aseguró que la víctima le había hecho.
Hasta lo sucedido, Aranda era concejal de Deportes y Barrios Rurales del Ayuntamiento de Teruel, por Ciudadanos. Tras su detención, el partido optó por darle de baja y abrió un expediente informativo.