Un magistrado -ya jubilado- que publicó un poema sobre Irene Montero y los miembros del comité editorial de la revista de la asociación judicial Francisco de Vitoria (AJFV) deberán indemnizar con un total de 70.000 € a la diputada de Podemos al ser considerada esa publicación como una "intolerable burla sexista" que lesionó su derecho al honor.
La sentencia va a ser recurrida por la asociación judicial, que en su día pidió disculpas a Montero y señaló que no compartía el contenido del poema, aunque no lo considera lesivo al honor.
El fiscal apoyó este criterio y pidió la absolución de los demandados por Irene Montero.
La revista de la AJFV, que se publica en papel de forma trimestral con una tirada de 6.000 ejemplares y va dirigida a jueces y operadores jurídicos, difundió en octubre de 2017 un poema sobre Irene Montero bajo el seudónimo 'el guardabosques de Valsain'. Se trata de juez que ya no está en activo y cuyas colaboraciones suelen revestir un tono satírico. Así, con motivo de la última renovación del Consejo General del Poder Judicial publicó una rima en la que ironizaba sobre el cargo de vocal: "Me presento a consejero/si es preciso en lista blanca/que la bicoca no es manca/no solo por el dinero/ Lo que sí me intranquiliza/no entrar en la permanente/que es chollo más conveniente/y poltrona más maciza".
El poema sobre Irene Montero aludía a su supuesta condición de "expareja del 'Coleta'" y añadía que "ya no está en el candelero/por una inquieta bragueta/Va con Tania al gallinero", en alusión a los escaños más altos del Congreso.
El juez de primera instancia número 38 de Madrid ha acogido íntegramente la demanda de la diputada de Podemos, incluida la indemnización solicitada al juez (50.000 euros) y al comité editorial de la AJFV (20.000). Es una cifra equivalente a la fijada para algunos casos de muerte de un cónyuge en accidente de tráfico.
El magistrado rechaza que el poema sea una "chanza amparada por la libertad de expresión", como sostuvieron los demandados, y considera que es "un insulto, insidia y vejación grave para la propia estima" de la diputada.
Es un texto "reiteradamente sexista", afirma la sentencia, que utiliza expresiones "machistas, gravemente peyorativas para la mujer", lo que "no puede quedar amparado por la libertad de expresión".
Añade que no consta que Montero autorizara la publicación de la fotografía por parte de la revista y "tampoco consta que la demandante, no obstante su personalidad pública como política y diputada del Congreso de los Diputados, haya dado o cedido aspectos de su vida personal e íntima y sus relaciones a la opinión pública".
"Tanto el autor del texto como los integrantes del comité de redacción de la revista de la asociación son todos ellos jueces/juezas y magistrados/as, circunstancia que comporta específica cualificación jurídica en el mundo jurídico [sic], y el texto litigioso denota manifiestamente [una] ofensa pública a la demandante, con ultraje para su dignidad y fama, además [de] como mujer, con la cualidad de ostentar la condición de diputada, integrante del Congreso de los Diputados, órgano constitucional de representación democrática de la soberanía popular, elegida para ello por más de cinco millones de ciudadanos/as mediante sufragio universal", señala.