Yolanda Díaz podría dejar la vicepresidencia: Moncloa se remite a la nueva dirección de Sumar
Alegría acusa a Feijóo de ser el culpable de los tres eurodiputados de Alvise: "Si blanqueas y copias a los ultras siempre aparece otro más ultra".
11 junio, 2024 15:59Moncloa garantiza "la estabilidad del Gobierno de coalición progresista" para lo que queda de legislatura. Y que ésta durará "los más de tres años que nos quedan" hasta que termine el ciclo que comenzó con las elecciones del 23 de julio del año pasado. Pero para esa estabilidad a Pedro Sánchez le hace falta que haya paz en Sumar: por eso, Yolanda Díaz ya no depende de sí misma para mantener su vicepresidencia segunda.
Será la nueva dirección de la formación que ella misma fundó hace apenas año y medio la que decida, en un proceso que se inicia a partir de este jueves.
Por un lado, fuentes de Moncloa confirman que "a Sumar le corresponde la vicepresidencia segunda, según el acuerdo de coalición". Por otro, fuentes de la formación minoritaria en el Gobierno explican a este diario que ese proceso se lanza este jueves, en una reunión de la dirección del partido. Y de ahí saldrán las decisiones.
Lo que es evidente es que Díaz sí que seguirá como presidenta del grupo parlamentario, como confirmó el ministro Ernest Urtasun en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros. "Que nadie busque inestabilidad, donde nos van a encontrar a ella y a nosotros", añadió Pablo Bustinduy, "es en seguir gobernando para mejorar las condiciones de vida de la gente".
La propia protagonista ha tomado la palabra en este debate, tratando de calmar las aguas revueltas en el seno de su formación, aunque sin desmentir ninguno de estos extremos. Díaz sostiene que seguirá formando parte de la ejecutiva de Sumar, aunque no como su líder. Y, de momento, coordinando la acción del socio minoritario del Gobierno.
"A esas gentes decirles que además hacemos esto para ganar en las siguientes elecciones generales", ha afirmado en Suiza tras mantener un encuentro bilateral con el director general de la Organización Internacional del Trabajo, Gilbert Houngbo. Según Díaz, las bases de Sumar pueden estar tranquilas pese a su renuncia. Además, se pone como ejemplo de "política de la buena", dado que cuando hay malos resultados electorales se deben asumir responsabilidades por convicción "ética".
Moncloa quiere calma
Sumar es una amalgama de partidos que nunca ha terminado de conformar una estructura clara, y en la que pesan más las direcciones de cada formación.
La implosión del artefacto político que armó Díaz al heredar el liderazgo del espacio a la izquierda del PSOE por decisión de Pablo Iglesias, provoca una batalla por el liderazgo entre las diferentes familias que lo conforman.
Las que tienen más peso son Izquierda Unida, los Comunes, Más Madrid y Compromís. Y ya han comenzado a correr las quinielas de nombres que podrían optar al nuevo liderazgo: dos de ellos estaban sentados este martes, junto a Pilar Alegría y Teresa Ribera, en la mesa de Moncloa.
Un claro mensaje del PSOE para que se visualizara que Sumar precisa de estabilidad, y que el Ejecutivo, o sea, Sánchez, quiere imponerla.
Otro fue el de insistir en que "todos los caminos llevan a Salvador Illa" como president en Cataluña, aunque el lunes se viera que ni tiene mayoría, porque ERC ha elegido independentismo y él no se ha ocupado en buscar el apoyo del PP.
Y uno más fue el de siempre: los ataques a Alberto Núñez Feijóo. "Él es el culpable de los tres eurodiputados de Alvise", sentenció. "Si blanqueas y copias a los ultras siempre aparece otro más ultra, así que donde había dos cabezas, ahora hay tres... la ultraderecha acabará teniendo más cabezas que la Hidra de Lerna".
Sin Sánchez en plena crisis
La todavía vicepresidenta segunda abrió este lunes un "periodo de reflexión", como dijo al anunciar su decisión de abandonar la coordinación de su formación política. Y este jueves podrían quedar claros los nombres de quiénes optarán al liderazgo. Si es alguno de sus compañeros del Consejo de Ministros, Sánchez se vería obligado a mover las fichas, para favorecer él esa "estabilidad" que precisa.
Recién publicada la Ley de Amnistía en el BOE, recién dimitida la vicepresidenta segunda como líder del socio minoritario del Gobierno, y recién consumado el primer desafío del independentismo en la sesión constitutiva del nuevo Parlament de Cataluña, se celebraba este martes el primer Consejo de Ministros posterior a la debacle del PSOE y del resto de sus aliados en las elecciones europeas del pasado domingo.
Y Pedro Sánchez no acudió. El presidente del Ejecutivo diluyó su amargada dulce derrota viajando en la tarde del lunes a Jordania, horas después de que Díaz le anunciara su decisión.
Sánchez inició su jornada a las 9.00 horas en el Mar Muerto, reuniéndose con el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres. En Jordania, Sánchez acudía, junto a unos 70 jefes de Estado y de Gobierno del mundo, a una Conferencia internacional sobre la respuesta humanitaria de emergencia para Gaza.
Organizada por el Rey de Jordania, Abdalá II; el presidente de la República de Egipto, Abdel Fattah Al Sisi; y el propio Guterres, el encuentro se celebra en el Centro de Convenciones King Hussein Bin Talal, a apenas 100 kilómetros de la zona de guerra.
Entretanto, el Consejo de Ministros lo presidió María Jesús Montero, con la ausencia también de Félix Bolaños, ministro de Justicia y de la Presidencia, convaleciente de una reciente operación de apendicitis.