El voto de los españoles residentes en el extranjero va a ser determinante en las elecciones gallegas del próximo 18 de febrero. Galicia es la comunidad autónoma con más ciudadanos con derecho a voto que residen fuera de España (el llamado censo CERA): 476.516 personas, el 17,69% de la población total, están llamadas a las urnas este mes. Se trata de la cifra más alta de la historia.
De hecho, en Galicia hay nada menos que 15 municipios en los que hay más votantes fuera del país que dentro. Se trata de las localidades de Avión (65,07%), Gomesende (63,68), Bande (62,29), Navia de Suarna (60,66), Quintela de Leirado (58,01), A Arnoia (57,35), Verea (56,53), Boborás (55,39), Beariz (54,29), Cortegada (53,33), O Bolo (53,27), A Fonsagrada (53,24), A Mezquita (52,71), Ramirás (52,08) y A Bola (50,1).
La mayoría de estos municipios pertenecen a la provincia de Orense, excepto Navia de Suarna y A Fonsagrada, que están en Lugo. Por provincias, no sorprende entonces que sea Orense la que más censo en el extranjero tiene, con el 29,18%. Casi un tercio de sus censados viven en el extranjero e influirán en el reparto de los 14 diputados que la provincia aporta al Parlamento gallego.
Le sigue Lugo, con el 20,63% influyendo en otros 14 diputados; Pontevedra, con un 15,16% del censo CERA y aportando 22 diputados al Parlamento y La Coruña, con un 15,15% y 25 diputados.
Si bien es cierto que las provincias con más gente en el extranjero son las que menos escaños aportan, la influencia del voto puede ser igualmente decisiva, como se vio en las distintas elecciones que se celebraron el año pasado y como ya ha pasado en Galicia en varias ocasiones.
En las autonómicas del 28 de mayo de 2023, Asturias contuvo hasta el último momento el aliento porque el recuento del voto en el extranjero estuvo a punto de arrebatarle la mayoría suficiente al presidente Adrián Barbón. En las generales del 23 de julio, el voto CERA provocó que un escaño del PSOE acabase en manos del PP.
Esta situación se produjo a pesar de que la comunidad presidida por Isabel Díaz Ayuso es una de las que menos voto CERA tiene en términos porcentuales. Sin embargo, fue suficiente para rebajar los números de Pedro Sánchez y complicar aún más la legislatura, tal y como se está viendo estos días.
Además, en Galicia es habitual que el voto en el extranjero influya. En 2005, Manuel Fraga se quedó a un escaño de la mayoría absoluta y el CERA estuvo a punto de dárselo, pero finalmente no fue así y propició su salida de la presidencia de la Xunta.
El propio Alberto Núñez Feijóo ha vivido la repercusión de este tipo de voto. En 2009 consiguió 39 escaños, mayoría absoluta, y perdió uno tras el recuento del CERA a favor del PSdeG, quedándose al borde de perder la mayoría absoluta. En el año 2020 se dio la situación contraria y arrebató un diputado a los socialistas, subiendo de 41 escaños a 42.
"Para nosotros, lógicamente, el voto exterior es de una importancia máxima en Galicia", aseguran fuentes del PSOE. "El PSdG no se acerca a los gallegos y gallegas del exterior sólo en elecciones, como hace el PP. El contacto con agrupaciones socialistas del exterior es constante", añaden.
"El PP tiene una presencia permanente en el exterior como en organización política, no sólo en campaña, siempre atento a los intereses y necesidades de los gallegos y gallegas, sobre todo en los países con mayor presencia de conciudadanos", responden desde el PP. "Estas semanas seguiremos trasladando a los gallegos del exterior nuestras propuestas generales y las específicas en materia de emigración y retorno", añaden.
De hecho, el actual presidente gallego, Alfonso Rueda, ha viajado a países como Argentina, Uruguay, Venezuela, México, Paraguay, Panamá y Suiza. La selección no es casual, ya que el 34,89% de los gallegos que viven fuera de España lo hacen en Argentina. Le siguen, aunque de lejos, Cuba (9,58%), Brasil (9,53), Uruguay (7,80), Suiza (7,16) y Venezuela (5,60).
Aumento de la participación
Además de que el censo CERA actual es el más alto de la historia, se espera que sea decisivo en las elecciones del próximo 18 de febrero porque se estima que la participación va a subir. Estas autonómicas son las primeras que se celebran desde que se eliminó el voto rogado, que estuvo en vigor desde el año 2011 hasta el año pasado.
"La eliminación del voto rogado ya tuvo un efecto muy positivo en la participación electoral de los gallegos del exterior en las últimas elecciones generales y consideramos que, en este proceso, también va a tener un efecto semejante", aseguran desde el PP. "Se producirá un incremento de la participación muy relevante en relación con las pasadas autonómicas", añaden.
Antes del voto rogado, la participación del censo CERA en las elecciones autonómicas gallegas oscilaba entre el 22,66% en su punto más bajo (2009) y el 34,7% en su punto más alto (2005). Con el voto rogado en vigor, la participación de los gallegos en el extranjero descendió del 3,26% de 2012 hasta el nimio 1,17% en 2020.
Las elecciones generales del pasado 23-J ya se celebraron sin el voto rogado y, si bien no se regresó inmediatamente a valores anteriores a 2011, sí que se notó una subida en la participación. En España, la participación duplicó los valores de 2019 y ascendió al 10%. En Galicia, participaron el 6,32% de los censados, casi seis veces más que el 1,17% que votó en las autonómicas de 2020, la última vez que fueron llamados a las urnas.
En cuanto a la variable de la ideología, el voto en el exterior se suele comportar en Galicia de una forma muy clara: hay una tendencia a votar a la derecha. En las generales del año pasado, el PP fue el claro vencedor, duplicando los votos que obtuvo el PSOE.
En este caso, se podría observar una especie de efecto Milei: Argentina es el país con más gallegos y la ultraderecha ha sido la vencedora de las últimas elecciones en el país, lo que podría condicionar también el voto de los gallegos en esa tierra.