Santiago Abascal fue un paso más allá en sus críticas a Pedro Sánchez este domingo. En una entrevista concedida al diario argentino Clarín, el líder de Vox acusó al presidente español de no tener principios, lo que le concede una "ventaja competitiva" en política hasta que llegue "un momento dado que el pueblo querrá colgarlo de los pies".
La polémica estaba servida. En una jornada por lo demás anodina en la política nacional, las palabras de Abascal resonaron en Moncloa y en Ferraz, que pusieron el foco en pedir al PP que condene las declaraciones de su socio de Gobierno en varias comunidades autónomas. Los de Feijóo, por su parte, señalan que no comparten las declaraciones de Abascal pero añaden que no ayudarán al PSOE "a distraer la atención de los españoles" sobre la toma en consideración de la ley de amnistía el martes en el Congreso.
Abascal viajó a Argentina hace unos días para asistir a la investidura de Javier Milei, con quien se reunió el pasado sábado. El líder de Vox estuvo presente el domingo, junto con el eurodiputado de su formación Hermann Tertsch, durante la toma del bastón de mando del líder argentino en el Congreso de la Nación.
Previamente, había concedido una entrevista a Clarín donde repasó las similitudes entre la formación de Milei, La Libertad Avanza, y Vox. Además, repasó la política nacional, donde criticó duramente al PP por haber realizado una campaña en la que "demonizan a Vox, tendían la mano al socialismo, publicaban encuestas falsas".
A renglón seguido, niega a la periodista que Pedro Sánchez estuviera "astuto" durante las semanas previas al 23-J: "Pedro Sánchez no es astuto y hábil como la gente piensa. Un político que no tiene escrúpulos, que no tiene principios, tiene una ventaja competitiva sobre los políticos honrados y que tienen escrúpulos porque nos ponemos límites. (...) Sánchez no tiene ninguno. Puede pisar las leyes, puede hacer cualquier cosa, puede poner en riesgo la unidad nacional. Eso le da una ventaja competitiva".
Llega entonces la polémica frase: "Habrá un momento dado que el pueblo querrá colgarlo de los pies". La oración recuerda a la exhibición pública, en 1945, del cadáver del dictador italiano Benito Mussolini, cuyo cuerpo fue colgado boca abajo en una viga y exhibido en la plaza de Loreto de Milán.
El PSOE responde
Dirigentes del PSOE y ministros del Gobierno de Sánchez han criticado las declaraciones de Abascal a través de las redes sociales. En este sentido, la vicepresidenta cuarta, María Jesús Montero, las ha calificado de "indignas" pues es "una grave incitación al odio".
"Algún día lamentaremos un daño irreparable. ¿Feijóo tiene algo que decir? ¿No es suficiente para echarlos de los gobiernos que comparten? Exigimos condena inmediata", ha pedido en la red social X.
En la misma línea se ha pronunciado el portavoz del PSOE en el Congreso, Patxi López, quien ha afeado al líder de Vox que vaya a la toma de posesión del presidente argentino, Javier Milei, donde se "junta" con el húngaro Viktor Orbán y "vomita amenazas contra el presidente del Gobierno".
"Habría sido vicepresidente del Gobierno con Feijóo. Este nivel de odio e insulto es insoportable e intolerable. España es mucho mejor que estos ultras", ha zanjado, por su parte, el director del Gabinete de la Presidencia del Gobierno, Óscar López. "El socio de Feijóo. Pero luego se rasgan las vestiduras por cualquier fruslería", ha escrito, a su vez, el ministro de Transportes, Óscar Puente.
Desde el propio PSOE también han exigido al líder de la oposición que rompa sus acuerdos de gobierno con Vox porque de no hacerlo "será cómplice". "¿Comparte Feijóo las palabras de su socio? ¿Va a romper los acuerdos que mantiene en CCAA y ayuntamientos con el partido neofascista Vox? Son dos preguntas sencillas. Esperamos respuesta urgente ante la gravedad de las declaraciones", han exigido los socialistas.
En términos similares se han pronunciado otros nombres relevantes del partido, del grupo parlamentario y del Gobierno, como Félix Bolaños, Diana Morant, Pilar Alegría, Isabel Rodríguez, Santos Cerdán, Cristina Narbona, Iratxe García, Hana Jalloul o Pedro Casares. Pasada la medianoche, ninguno de los ministros de Sumar ni la propia formación política se habían pronunciado al respecto en X.
"No compartimos las declaraciones"
El Partido Popular, por su parte, ha respondido a los comentarios de los socialistas asegurando que "no compartimos las declaraciones de Santiago Abascal" y ha reprochado su "intento por implicar al PP, de manera burda, en una polémica artificialmente ampliada".
En un comunicado, el partido presidido por Núñez Feijóo ha acusado al PSOE de intentar "tapar con supuestas reuniones y mesas de diálogo, pero también con presuntas ofensas al otro lado del charco, dos cuestiones": la votación de la toma en consideración de la Ley de Amnistía en el Congreso y la utilización de un mediador en las negociaciones con Junts y ERC.
"No ayudaremos al PSOE a distraer la atención de los españoles. Esta semana el protagonismo no está en lo que dice Vox, sino en lo que hacen los socialistas en el Congreso", reza el texto.
Así, el partido ha zanjado esta polémica asegurando que "de lo que diga Vox hablará el PSOE. De lo que haga el PSOE hablaremos nosotros".
Pese a todo, los socialistas no han dado por terminada esta disputa y han criticado la reacción del Partido Popular tachándola de "insuficiente". Fuentes del partido han declarado a Europa Press que "decir que no se 'comparten' unas declaraciones como las del líder del partido neofascista Vox es a todas luces insuficiente".
El PSOE ha insistido en reclamar al líder del Partido Popular "y principal arquitecto de los pactos de los neofascistas españoles", según los socialistas, que "condene las declaraciones y rompa sus pactos con un partido político que día tras día se sitúa en los márgenes de la democracia".