El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha intervenido este sábado en el Comité Federal y, a puerta cerrada, ha criticado la ley de amnistía que ha defendido Pedro Sánchez. "No hay garantías de que el independentismo renuncie a volver al punto de partida", ha dicho.
Según ha podido saber EL ESPAÑOL, el presidente autonómico ha dicho que el debate no debe centrarse en si cabe o no en la Constitución, recordando que Vox también cabe en la Constitución, sino en si va a servir realmente para que los partidos independentistas renuncien a sus principios, entre los que se encuentra el referéndum.
También ha recordado que en las elecciones autonómicas del pasado 28 de mayo los ciudadanos penalizaron los pactos con los independentistas a pesar de los buenos resultados económicos del país. Cabe recordar que gran parte de la campaña electoral de entonces giró en torno a las alianzas de Sánchez y muchos consideran que se penalizó a los presidentes autonómicos socialistas para castigar al presidente del Gobierno.
[Sánchez: "Defiendo la amnistía para hacer de la necesidad, virtud"]
Aunque ha defendido el pacto de Gobierno con Sumar, considera que la estrategia negociadora después de las elecciones del 23 de julio no tendría que haber sido la actual. Cree que habría que haber apostado por hacer elegir a los partidos entre la dicotomía de un gobierno del PSOE con Sumar, frente a uno del PP y Vox.
Page ha sido el más crítico de los barones socialistas asistentes al Comité Federal, que sigue en marcha en este momento. Minutos antes, Sánchez había intervenido para defender sin ambages la amnistía en su alegato más contundente y claro hasta el momento. "En nombre de España defiendo que la amnistía es la solución en Cataluña", aseguró el líder del Ejecutivo.
A su salida del Comité Federal del PSOE, Page ha retirado su rechazo a una amnistía a los líderes del procés, pero ha valorado el "paso" que ha dado el líder socialista al "abordar directamente el problema que todo el mundo comenta en España" con argumentos "sinceros y francos".
"Yo discrepo abiertamente, sinceramente, y voy a trabajar para que no haya divorcio entre la opinión que hay hacia dentro del partido, con la opinión de toda la gente que nos apoya", ha declarado a los medios.
Tras la citada intervención de Sánchez, ante los aplausos de los congregados, Page no se levantó de su asiento, al igual que hizo toda la delegación de Castilla-La Mancha. A su llegada al cónclave, el presidente castellano-manchego fue uno de los que más tiempo pasó frente a los micrófonos de los medios analizando la actualidad.
"Vengo a mostrar mi rechazo a la amnistía, lo que digo fuera es lo que diré dentro. La amnistía no casa con los valores del PSOE. Apoyaré que se consulte a la militancia siempre que la pregunta sea clara y no una mediopregunta, eso es dudoso", remarcó Page a su llegada.
Page tampoco ha desvelado qué votará en la consulta a la militancia, que tendrá lugar entre el 30 de octubre y el 4 de noviembre, pero asegura que le parece "bien" que se consulte y afirma que acatará lo que decida la militancia.
"Pero una cosa es acatar y otra cosa es comulgar", ha advertido.
En el aval sin fisuras a Sánchez se ha situado el presidente de Asturias, Adrián Barbón, quien ha explicitado su apoyo al acuerdo con Sumar, "por muchos motivos. Creo que profundiza en la política social", en un momento en el que esta es más necesaria que nunca.
Por su parte, el expresidente valenciano Ximo Puig ha abogado por la convivencia, la reconciliación y el acuerdo, y ha tildado el acuerdo con Sumar de "muy ajustado a la realidad".
También se ha referido al asunto el secretario del PSC, Salvador Illa, que ha mostrado la disposición del Comité a dar apoyo al acuerdo progresista con Sumar mientras que la exvicepresidenta Carmen Calvo ha subrayado la obligación del PSOE de dar estabilidad y progreso al país: "Para eso nacimos hace 150 años, y es lo que vamos a seguir haciendo".EFE