La izquierda ha vuelto a hacer frente común en el aniversario del fusilamiento de las Trece Rosas, como se conoce al grupo de trece mujeres –la mitad de ellas, de la JSU– fusiladas en 1939 durante la represión franquista. En un aluvión de mensajes publicados en las redes sociales, portavoces de la mayoría de partidos progresistas han ligado su recuerdo al reciente pacto entre el PP y Vox en el Gobierno de Aragón, donde precisamente uno de los acuerdos obliga a borrar las leyes de memoria.
Especialmente la vicepresidenta segunda en funciones y líder de Sumar, Yolanda Díaz, ha sido la más clara en señalar que "mientras el PP y Vox quieren derogar la Ley de Memoria Democrática, seguimos recordando los nombres de quienes fueron asesinadas por defender la libertad". Por su parte la secretaria general de Podemos, Ione Belarra, ha recordado los nombres de las trece y prometido que "nunca se borrarán de la Historia".
La relación entre Vox y el aniversario del fusilamiento, en el que también perdieron la vida otros cuarenta y tres jóvenes acusados de rebelión por los tribunales franquistas, viene de largo. En 2019 el secretario general de los ultraderechistas, Javier Ortega Smith, dijo de las Trece Rosas que eran "eran mujeres que torturaban, mataban y violaban vilmente", en unas declaraciones que llegaron a ser evaluadas por el Tribunal Supremo.
El acuerdo de Aragón prevé derogar la Ley de Memoria Democrática (que Vox ha tachado de "sectaria") y no menciona expresamente la lucha contra la violencia de género, aunque sí incluye un paquete de medidas para "proteger a las mujeres". Todo esto un día antes del homenaje a las asesinadas.
En paralelo, colectivos memorialistas, el Partido Comunista de España (PCE) y las Juventudes Socialistas recordado "a los 56 luchadores por la libertad fusilados en el Cementerio del Este el 5 de agosto de 1939, una vez terminada la Guerra Civil, por su militancia en las Juventudes Socialistas Unificadas". El homenaje de hoy, titulado Que mi nombre no se borre de la historia, reunió a varios cientos de personas en Madrid.
La juventud y las circunstancias que envolvieron al asesinato de las jóvenes, acabada ya la Guerra Civil, las convirtieron en un símbolo de aquel horror que se vivió en España. Históricamente, buena parte de las leyes de memoria han contado o referenciado episodios similares, si no directamente este.
De hecho, como ocurre cada año, el acto de aniversario cada 5 de agosto suele convertirse en un estallido floral en el cementerio de la Almudena, donde están enterradas, con multitud de símbolos y referencias a la II República. Tanto el PCE como el PSOE suelen ser quienes más se atribuyen su legado.