"No puedo dejar entrar en el Gobierno a quienes niegan la violencia machista, a quienes usan el trazo gordo, a quienes deshumanizan a los inmigrantes, a quienes tiran a una papelera la bandera LGTBI. (...) Tampoco voy a entrar en batallas culturales que están superadas; se trata de solucionar el futuro de los extremeños".
Éstos han sido los duros trazos con los que María Guardiola, líder del Partido Popular de Extremadura, ha retratado a Vox. Así se ha pronunciado la candidata a la Junta este martes, en un discurso público tras la ruptura de las negociaciones entre el PP y el partido de derecha radical para conformar el Gobierno regional.
"Creo en una Extremadura moderna, respetuosa, permeable, solidaria, responsable; creo en una Extremadura donde el amor no admita matices", ha añadido. En su perfil de Twitter, ha continuado con las críticas: "Ellos querían sillones. Yo, un Gobierno estable".
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Guardiola no es la primera líder del PP que arremete duramente contra algunas de las principales líneas ideológicas de Vox. Su discurso retrotrae a las palabras de Pablo Casado, entonces líder nacional de la formación, en octubre de 2020, en el Congreso de los Diputados.
"No es que nos hayamos rendido, es que no queremos ser como ustedes", le dijo a Santiago Abascal, quien se presentaba como candidato en la moción de censura contra Pedro Sánchez capitaneada por Vox. "La alternativa [a Sánchez] no se construye recitando hazañas bélicas y cabalgando un ejército de trolls", criticó.
"Ha llegado el momento de pasar del enfado a algo constructivo. Decimos no a este engendro antiespañol que patrocinan con esa política cainita", culminó Casado su discurso en contra de la moción de censura de Abascal.
Fuentes del Partido Popular confirman a EL ESPAÑOL que la postura de María Guardiola cuenta con la bendición plena de la dirección nacional del Partido Popular. "Lo que ha dicho hoy la líder del PP extremeño podría ser defendido por cualquier afiliado o cargo del partido", subrayan.
¿Pero ese respaldo es tal, aunque haya que repetir elecciones, como previsiblemente sucederá en Extremadura y hasta la propia líder del PP ha reconocido? Sí. "Confiamos en María y en que hará lo mejor para Extremadura", señalan las mismas fuentes.
De hecho, el PP confía en que si se repiten los comicios en la región, absorberán gran parte de "voto útil", en detrimento de Vox. ¿Teme el PP que, tras la ruptura en Extremadura, su socio preferente se revuelva en otros territorios? "Confiamos en que Vox haga negociaciones diferenciadas, como nosotros, ya que cada territorio tiene sus peculiaridades y merecen esa consideración", señalan fuentes populares.
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Es más, recuerdan que una gran parte de su electorado piensa de una forma similar a la verbalizada por Guardiola (y, antes, por Casado). Es cierto, además, que el PP ha fagocitado la mayor parte del voto más centrista y liberal que, hasta el pasado 28-M, había sustentado a Ciudadanos.
Desde Génova aseguran que los barones populares tienen "autonomía plena" para negociar sus Ejecutivos y que la aspiración del partido sigue siendo la de gobernar en solitario, pese a que en la Comunidad Valenciana ya hayan pactado un Gobierno en coalición.
Además, el discurso de la líder del PP extremeño coincide con el expresado por Alberto Núñez Feijóo a lo largo de los últimos días para distanciarse de la extrema derecha.
"La violencia machista es una obviedad", subrayó el actual líder nacional del PP para responder a las palabras del número 2 de Vox en Valencia. "Desde el PP, no daremos ni un paso atrás en la lucha contra esta lacra. No vamos a renunciar a nuestros principios, cueste lo que nos cueste", sentenció el dirigente gallego.