Pedro Sánchez ha ofrecido este lunes su entrevista más arriesgada ante Carlos Alsina en Onda Cero. La entrevista ha sido una auténtica montaña rusa desde las primeras preguntas planteadas por el periodista:
—¿Se considera un hombre de palabra, de principios?
—"He tratado siempre de cumplir con mi palabra", ha respondido el presidente.
La réplica de Carlos Alsina ha sido terrible: "¿Y por qué nos ha mentido tanto entonces, presidente?"
"Dígame usted en qué", ha acertado a decir Sánchez. "Tengo una lista larga...", ha comenzado a enumerar Carlos Alsina. El presidente del Gobierno ha tenido que enfrentarse así a sus grandes contradicciones, cuando Alsina le ha recordado que prometió cambiar la ley para garantizar la independencia del Poder Judicial, tipificar el delito de convocatoria de referéndum de independencia, no pactar con Bildu y no indultar a los condenados por el 1-O.
"He tenido cambios de posición política en algunos asuntos de Estado, sin duda alguna", ha reconocido finalmente Sánchez, "he tenido que tomar decisiones difíciles y muy complejas".
Sánchez ha asumido que algunos antiguos votantes socialistas pueden sentir ahora la tentación de no apoyar al PSOE en las elecciones generales del 23-J, debido a estos incumplimientos.
"No he gobernado con Bildu"
Sobre todo porque "la derecha política y mediática sigue con sus infundios", ha alegado el presidente, "gobernar con Bildu no es cierto que haya hecho eso, no hemos tenido ministros de Bildu, ni hay un acuerdo de gobierno con Bildu. Lo que ha habido es una dinámica parlamentaria con EH Bildu, como con otras fuerzas políticas, para sacar adelante muchos avances sociales".
"Un acuerdo de gobierno significa haber firmado un acuerdo de legislatura", ha recalcado, "no lo hay, lo que hay son acuerdos puntuales sobre algunas leyes". Al respecto, ha subrayado que el PP ha convalidado en las Cortes 51 decretos del Gobierno durante la actual legislatura, mientras que Bildu sólo ha apoyado 48.
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Pedro Sánchez ha restado importancia a las declaraciones efectuadas la pasada semana por el delegado del Gobierno en Madrid, Francisco Martín, quien sostuvo que Bildu ha "contribuido a salvar miles y miles de vidas", gracias a sus pactos con el Gobierno.
"Se equivocó y rectificó, desde luego yo no comparto esa posición", ha indicado Pedro Sánchez, "tuvo unas declaraciones desdichadas, pero se disculpó y pidió perdón, no podemos elevarlo a categoría".
Carlos Alsina ha preguntado hasta en dos ocasiones al presidente Pedro Sánchez si se "siente orgulloso" de la gestión de Irene Montero como ministra de Igualdad, "ahora que no la quieren ni en Sumar".
"Son públicas y notorias mis discrepancias con la ministra, como la Ley del sí es sí", ha reconocido el presidente, quien ha asegurado que el PSOE tardó más de seis meses en reformar esa norma porque intentó sin éxito "persuadir" a Irene Montero de que había que corregir ese error.
"Yo asumo en primera persona ese error, pedí disculpas a las víctimas de agresiones sexuales y rectifiqué", ha dicho Pedro Sánchez ante la insistencia del periodista, "intenté por todos los medios persuadir a la ministra de Igualdad del error que se había cometido. Y opté porque el PSOE presentara su reforma", sin el apoyo de Podemos.
Pese a estas "discrepancias", Pedro Sánchez ha asegurado que la "agenda feminista ha sido transversal" en las políticas del Gobierno: las mujeres han sido las grandes beneficiadas de la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) y de la actualización de las pensiones por viudedad, ha argumentado. Además el Gobierno ha destinado 320 millones a la lucha contra la violencia de género.
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El presidente del Gobierno se ha mostrado dispuesto a celebrar "mañana mismo" un debate cara a cara con Alberto Núñez Feijóo en la misma emisora, aunque ha evitado agradecer a los populares que facilitaran la alcaldía de Barcelona al socialista Jaume Collboni.
"Parece curioso que Feijóo pretenda convertirse en un hombre de Estado, cuando no ha hecho otra cosa que lo que hizo Manuel Valls hace cuatro años [dio sus votos para que fuera alcaldesa Ada Colau y evitó así que el Ayuntamiento de Barcelona cayera en manos de los independentistas]. Y lo mismo que ha hecho hoy el PSOE en Pamplona, dándoselos a la fuerza conservadora como UPN", ha argumentado Sánchez para restar méritos a la posición adoptada por el PP.
"Abascal será vicepresidente"
El presidente ha reprochado a Feijóo que reclame que se permita gobernar a la lista más votada, cuando el PP no ha respetado este principio con los pactos que ha suscrito con Vox para gobernar decenas de ayuntamientos.
"A la derecha tenemos un dúo que sin ningún tipo de ambages dice: vamos a gobernar en coalición", ha comentado Sánchez, "de Feijóo ya sabemos quién será su vicepresidente si gobierna, Santiago Abascal".
"Más peligroso que Vox", ha abundado, "es ver a un PP que asume las tesis de Vox de negación de la violencia de género, del cambio climático y de la enorme responsabilidad que tenemos con las generaciones futuras. El discurso del PP es el mismo que el de Vox, derogar lo que se ha hecho estos cuatro años".
Ante las elecciones generales del 23 de julio, ha añadido el presidente, sólo "hay dos opciones: o Sánchez o Feijóo. Y ya se ha desvelado cuál es la relación estratégica que el PP tiene con Vox, gobernando juntos en comunidades autónomas y ayuntamientos. El PSOE es una organización que merece un respeto", ha dicho el presidente.
Cuando Carlos Alsina le ha recordado que mintió al prometer que nunca concedería los indultos a los condenados por el referéndum ilegal del 1-O, Pedro Sánchez ha apelado a los efectos beneficiosos generados por la "medida de gracia" del Consejo de Ministros.
"Tras estos cinco años tan difíciles, creo que la política está para resolver problemas", se ha sincerado, "Cataluña hoy no es una de las mayores preocupaciones de los ciudadanos, y lo era cuando tomé decisiones difíciles como los indultos, muchos militantes del PSOE no lo entendieron".
Los indultos del 1-O
En cambio, ha agregado, "la situación hoy en Cataluña nada tiene que ver con la del año 2015, 2017 o 2019, cuando había contenedores incendiados en las calles. Hoy la primera fuerza en Cataluña es constitucionalista, el PSOE, y hay un alcalde socialista en Barcelona" (gracias a los votos del PP).
Sánchez ha enumerado los tres motivos por los que tacha de "trumpista" al PP de Alberto Núñez Feijóo: el incumplimiento de la legalidad ("el PP lleva cinco años incumpliendo la Constitución" por negarse a renovar el CGPJ, ha recordado), no acatar el resultado electoral (Ayuso habló de "pucherazo" tras la detención de tres candidatos socialistas por la compra de votos en la campaña del 28-M) y "deshumanizar al adversario".
"Si quiere se lo digo en privado"
El PP, ha señalado al respecto el presidente, "se dedica a decir que Sánchez es un bolivariano, un soberbio, una persona que no tiene sentimientos... el partido sanchista, le dicen ahora".
Pedro Sánchez ha eludido aclarar cuáles son los medios de comunicación que se dedican a lanzar "bulos e infundios" para echarle del Gobierno, tal como sostuvo ante el Grupo Parlamentario Socialista al día siguiente de convocar elecciones: "Eso si quiere luego en privado se lo puedo decir, porque soy presidente del Gobierno", le ha dicho a Carlos Alsina.
Como el periodista insistía en esta cuestión, Sánchez ha argumentado: "Cualquier analista u observador es consciente de que hay una desproporción en la representación de voces progresistas en tertulias o medios de comunicación, respecto a la realidad de nuestro país, en el que hay alrededor de un 50% de votante conservador y un 50% progresista, eso no se lo encuentra en los medios de comunicación".
"Yo denuncio esa desproporción" ha insistido, "un desequilibrio en favor de las opciones conservadoras. La realidad sociológica de nuestro país nada tiene que ver con las cosas que se escuchan en las tertulias y programas de radio".