Isabel Díaz Ayuso, eufórica, ha concluido la campaña electoral para las elecciones del próximo domingo con toda una retahíla de críticas hacia Pedro Sánchez. Exprimiendo su perfil como ariete contra el presidente del Gobierno, ha proclamado: "Se irá como llegó, con intento de pucherazo". Por si había dudas de la nacionalización de la campaña.
La presidenta madrileña se ha referido a los sucesivos escándalos de compra de votos que han ido trascendiendo en las últimas horas y que sacuden al PSOE. A su juicio, "la campaña con la que Sánchez pretendía comprar a España, Consejo de Ministros a Consejo de Ministros, con el dinero de todos, se ha convertido en su campaña más larga".
"Una semana más y no hay un delito tipificado en el Código Penal que no protagonice un candidato de la izquierda: por pertenencia a banda terrorista, a banda juvenil, por secuestro, por pegar, acosar a compañeros; o lo más grave, por comprar papeletas, incluso cambiar papeletas por papelinas", ha agregado. Pero, en su opinión, "lo que ha pasado demuestra que España sigue viva, que sus instituciones aún resisten".
Ayuso ha centrado buena parte de su mitin final de campaña en derribar contra Sánchez, a quien ha acusado, entre otras cosas, de estar "dispuesto a sacrificarlo todo para mantenerse en el poder: el dinero de los parados, el voto de los inmigrantes, el prestigio de España en las instituciones internacionales, la dignidad con Marruecos".
En una suerte de repaso de la legislatura, ha agregado: "El Estado de derecho ante etarras, violadores y golpistas; la unidad de España, los derechos de los españoles acosados por los nacionalistas, la dignidad de las víctimas, la independencia judicial y el cumplimiento de las sentencias; la neutralidad del Parlamento, la Guardia Civil, una deuda inasumible y antidemocrática para las nuevas generaciones, la libertad de prensa".
[La alcaldesa de Maracena (PSOE) acusa al juez que investiga el secuestro de "perturbar" el 28-M]
"Insultos a empresas, empresarios y ahí están sus armas: el decretazo, el pucherazo, la homilía bolivariana sin preguntas de los periodistas (...), las leyes chapuza, el Código Penal a la carta; los indultos, la ingeniería social, colocar a sus amigos colonizando las instituciones, marginando a los funcionarios de carrera, persiguiendo a sus enemigos en el Falcon y siempre con marca de la casa: la mentira". Con todo ello, Ayuso ha concluido: "A Sánchez ya no le vota ni Chapote".
En cambio, la presidenta madrileña cree que "este domingo, la España real, la España fiel, saldrá a las urnas para decidir su futuro". "Vayamos a votar masivamente para sortear las trampas y para poner en su sitio a los enemigos de España y de los españoles, a los enemigos de todo lo que nos hemos dado juntos porque nos quieren débiles, empobrecidos y enfrentados", ha enfatizado.
En una segunda parte de su discurso, la presidenta madrileña se ha referido al "pueblo de Madrid", con el recuerdo de la victoria que cosechó en las elecciones de mayo de 2021: "Me dieron su confianza mayoritaria, mi vida ha quedado definitivamente marcada y para siempre por las suyas y ahora no sé andar otro camino y no sé vivir de otra manera".
Con el líder del PP sentado en primera fila, la presidenta madrileña ha presumido de que su partido está "más unido que nunca" y preparado para "enderezar el rumbo de España". En clave interna, especialmente llamativo ha sido el agradecimiento a Alberto Núñez Feijóo por brindarle su "apoyo desde el primer día, sin contemplaciones". Por ello, le ha dicho: "Estaré a tu lado, siempre a tu entera disposición".