Se agrava la crisis para Begoña Villacís. Una semana después de descubrirse su reunión con el PP y de confirmar ella que continuaba en Ciudadanos, no ha conseguido los avales de la militancia necesarios para ser la candidata a la alcaldía de Madrid. Así consta en los documentos del comité de garantías que van a ser publicados.

Sin embargo, Villacís sí repetirá en la papeleta, ya que ningún otro candidato ha logrado alcanzar la cuota. En estos casos, los estatutos prevén que sea la dirección nacional quien elija al candidato. Y ya lo ha hecho: será la actual vicealcaldesa.

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El umbral mínimo de avales, que fue aumentado en el proceso de refundación, es del 15%. Teniendo en cuenta que la militancia en la ciudad de Madrid está entre los 800 y los 900, se requerían 126. De ahí la sorpresa palpada por este diario tanto en el equipo de Villacís como en algunos de sus concejales. "¿Cómo es posible? ¿Ni siquiera Begoña logra los avales?". Estas son dos de las frases más repetidas.

La noticia ha caído como un jarro de agua fría en un partido que ve poco a poco laminadas sus expectativas electorales. Begoña Villacís es la candidata más atractiva de cara al proceso electoral de mayo. En la Comunidad de Madrid, por ejemplo, ninguno de los nombres pertenece al ámbito de la opinión pública.

En la región, será la candidata Araceli Gómez, mujer de confianza de Villacís, que tampoco ha obtenido el 15% de los avales. Del mismo modo que la vicealcaldesa, ha sido ungida por el aparato del partido.

De entre todas las alcaldías importantes y las presidencias autonómicas, sólo habrá primarias en la ciudad de Barcelona, donde sí ha habido dos opciones con los avales necesarios: Koldo Blanco y Anna Grau.

En el entorno de Villacís se apresuran a señalar que sólo cuatro votos le han faltado a la vicealcaldesa para pasar la nota de corte y que, con el reglamento anterior, habría conseguido el objetivo. Entonces, el umbral mínimo era del 10%, y no del 15%.

El horizonte de Villacís

Begoña Villacís fue el rostro más conocido de los que pilotó la refundación de Ciudadanos. Era la única candidata naranja que, conforme se acercaban las elecciones de mayo, aparecía en las encuestas con capacidad para sobrevivir.

Sellada la refundación –donde se especificaba que Ciudadanos no se integrará en ningún otro partido–, Villacís irrumpió en el debate con una propuesta divergente: dar libertad a los líderes municipales para concurrir en solitario o en una lista con otras siglas.

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En un vídeo difundido en sus redes sociales, Villacís negó que su opción fuera integrarse en el PP. Lo hacía después de que El País le atribuyera haber dicho a sus concejales que se había planteado la opción de instaurar una suerte de corriente liberal entre los populares.

La vicealcaldesa reiteró que ese supuesto estuvo sobre su mesa en algún momento, pero que ya lo había descartado. Sin embargo, en apenas cuarenta y ocho horas quedó destapada su reunión con Elías Bendodo –encargado de los fichajes de Feijóo– en una cafetería cercana a Génova.

Villacís se vio forzada a comparecer ante los medios de comunicación. Indicó que intentaría ser la candidata de Ciudadanos a la alcaldía de Madrid y que nunca se le había pasado por la cabeza "pasarse al PP".

Preguntada por la reunión con Bendodo, señaló que no había sido ese el objetivo y que acostumbra a "hablar con gente de todos los partidos". Acto seguido, presentó su candidatura a las primarias de Ciudadanos. Concluido el plazo, ha trascendido que no ha conseguido los 126 avales necesarios.