La nueva prórroga del plazo de enmiendas a la Ley Trans apoyada por el PSOE mantiene abierta no sólo la división dentro de los socialistas, también aviva las críticas en Podemos. La ministra de Igualdad, Irene Montero, ha dado de plazo al PSOE hasta el 18 de noviembre para que presente un calendario que permita la aprobación de esta norma antes de que acabe el año "sin ningún retroceso" en el contenido de la normativa.
Montero ha calificado de "incomprensible" que el PSOE haya dado luz verde a ampliar una semana más el plazo para la presentación de enmiendas a la Ley Trans. "Esto sólo perjudica a las personas trans que ven el riesgo esta", ha señalado la ministra, que ha advertido de que "sus derechos van a ser ley y no les vamos a soltar la mano" en un contundente mensaje dirigido a los socialistas.
La titular de Igualdad ha pedido al PSOE acordar un calendario de tramitación que incluya la finalización de la ponencia de esta norma el 18 noviembre y en el que se garantice que será aprobada antes de que termine este año. El objetivo, ha explicado este miércoles Irene Montero, es "garantizar que no haya más retrasos".
"Espero que el PSOE rectifique"
"Espero que el PSOE rectifique y nos acompañe en este camino", ha dicho Montero antes de entrar en una reunión ministerial sobre el fortalecimiento del papel de la mujer en la sociedad de la Unión por el Mediterráneo.
Así, Irene Montero propone a su socio de Ejecutivo y al resto de grupos parlamentarios cerrar la ponencia de la ley el 18 de noviembre. Para ello, el plazo de enmiendas debe finalizar el 2 de noviembre.
Desde el Gobierno, la vicepresidenta primera y ministra de Economía, Nadia Calviño, ha defendido esta nueva ampliación del plazo de enmiendas para garantizar un "texto coherente" ante un posible recurso ante el Tribunal Constitucional. "Más importante que correr es que la ley salga bien, que sea una ley muy sólida y no tenga ni una duda desde el punto de vista constiucional", ha dicho este miércoles en una entrevista en Telecinco.
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Fue este martes a última hora de tarde cuando el PSOE amplió por cuarta vez el plazo para presentar enmiendas a la Ley Trans, algo que hizo sin informar a Podemos y bajo el argumento de que los socialistas no tienen aún una respuesta clara al respeto.
Fuentes del PSOE aseguran que esta prórroga será la última y que se debe a que tienen que revisar cuestiones técnicas, por lo que la semana que viene se iniciará su tramitación. La ampliación de plazos es una decisión que corresponde a la Mesa del Congreso de los Diputados, donde el PSOE tiene mayoría.
Carmen Calvo
La crisis interna en el seno del PSOE estalló la semana pasada cuando la formación decidió ampliar de nuevo el plazo de enmiendas. Esto provocó no sólo una gran discusión interna, también la salida del partido de la reconocida activista transexual por los derechos LGTBI y exdiputada de la Asamblea de Madrid, Carla Antonelli, por la "profunda decepción" con su partido por los continuos retrasos en la tramitación
"No en mi nombre. Prefiero ir por la calle y mirar de frente a mis compañeras/os/es trans que agachar la cabeza de la vergüenza por haberles traicionado, y lo que es peor, haberme traicionado a mí misma", escribió en un comunicado en el que señalaba a Carmen Calvo como responsable de la deriva del PSOE.
Precisamente la discusión sobre la autodeterminación de género, el punto fundamental de la norma, es el que enfrentó al sector feminista clásico liderado por Carmen Calvo, que aseguraba que no existía en ningún país ni cabe en la ley.
El pasado jueves se zanjó el debate cuando, después de la intervención de Pedro Sánchez, el partido descartó finalmente tocar la autodeterminación de género. Sin embargo, la dirección del partido mostró dudas respecto a la equiparación de la violencia de género y la violencia intragénero.
Este lunes, la exvicepresidenta Calvo se defendía de las críticas y aseguraba que el expresidente José Luis Rodríguez Zapatero, para quien la norma "no afecta a los derechos de las mujeres", expuso su opinión "de una manera un poco simple". Horas después, el PSOE ampliaba el plazo de enmiendas con el argumento de "dar seguridad jurídica a la Ley, que sabemos acabará recurrida por el PP y sus socios de la ultraderecha en el Tribunal Constitucional".