El Consejo de Ministros aprobará este martes la puesta en marcha del Centro Estatal de Salud Pública, que cuenta con una asignación de casi 10 millones de euros en los Presupuestos Generales del Estado de 2022.
Su ubicación todavía es una incógnita, pero todo indica que la Comunidad Valenciana y Aragón son las que cuentan con más posibilidades de albergarlo.
Andalucía también presentó su propuesta de viva voz ante el propio presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, hace menos de un mes, pero son Ximo Puig y Javier Lambán los finalistas.
Como ya adelantaba EL ESPAÑOL en octubre, el organismo dependiente del Ministerio de Sanidad va a ser de los primeros en ubicarse fuera de Madrid, cumpliendo con la promesa de "descentralización" de instituciones públicas que hizo el presidente del Gobierno.
Según las fuentes consultadas, ahora mismo Valencia podría estar incluso por delante de Zaragoza. "Fernando Simón estuvo visitando unas instalaciones preparadas para ello hace ahora un año, pero desde entonces el proyecto está parado", explican desde la Salud Pública valenciana.
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El gesto de Pedro Sánchez hacia Puig sería "necesario", según algunas fuentes socialistas, después de que le haya apoyado en medidas en las que otros le han dejado solo, pero también porque la Comunidad Valenciana viene siendo en los últimos años la que cuenta con la peor financiación del Estado.
Hace apenas unas semanas, Ximo Puig era el único de los barones socialistas que apoyaba sin fisuras el plan de ahorro energético de Moncloa. Lambán, en cambio, lo avalaba con la boca pequeña y pedía reuniones con los sectores implicados, en la línea de los dirigentes del Partido Popular.
La Consejería de Sanidad del Gobierno de Aragón envió un escrito hace "muchos meses" al Ministerio de Sanidad ofreciéndose como futura sede del nuevo ente. Zaragoza parecía la opción más factible.
Red de alertas
Allí, en marzo, la ministra de Sanidad, Carolina Darias, presentó la llamada Declaración de Zaragoza. Es un compromiso para impulsar y mejorar la vigilancia en Salud Pública en el Sistema Nacional de Salud que firmaron por todos los consejeros de Sanidad y que consiste, principalmente, en modificar el recuento de datos covid.
Desde entonces ya no se contabilizan los positivos por test y sólo se registran las PCR de mayores de 65 años. El objetivo de Sanidad es poner en marcha una red de vigilancia epidemiológica similar a la de la gripe pero, para ello, hace falta dinero y el citado Centro Estatal de Salud Pública.
Pero no sólo las regiones socialistas han mostrado su interés en esta agencia. El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, defendió ante Sánchez en el palacio de la Moncloa que ciudades como Sevilla o Granada reunían las condiciones para acoger el centro.
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Granada sería la mejor opción y, como ocurre con Valencia o Zaragoza, tendría un significado. En la ciudad andaluza está la sede de la Escuela Andaluza de Salud Pública.
El centro tiene una gran reputación nacional e internacional y, entre sus filas, cuenta con grandes expertos en la materia como José Martínez Olmos, el ex secretario general del Ministerio de Sanidad durante la gripe A. Una voz con gran bagaje político y clínico en estas materias.
La creación del Centro Estatal de Salud Pública para gestionar futuras pandemias y problemas de salud pública es una promesa con más de 10 años de antigüedad que formará una red de alertas.
Pese a las peticiones de los profesionales en Salud Pública, no será un organismo independiente. Por eso se habla de Centro y no de Agencia. También el PP pedía un organismo completamente independiente, como ocurre con la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS).
'Vuelve' Fernando Simón
Aun así, y según el proyecto de ley al que ha tenido acceso este diario y que será la base para lo que se aprobará el martes, este órgano sí tendrá "autonomía funcional" que "contribuirá a la toma de decisiones en tiempo real".
El objetivo principal es que la Agencia se conforme mediante una "red de centros". Es decir, que en cada servicio de Preventiva de cada área sanitaria (hay unas 300 en toda España) haya un centro que sirva de centinela.
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El Ministerio de Sanidad coordinará el Centro Estatal de Salud Pública y a él llegarán avisos de los 300 centros de referencia centinela. Así, si hay un caso sospechoso de un virus (no obligatoriamente de Covid-19) en Almería y otro en La Coruña, el aviso se centraliza en un sólo órgano y se puede coordinar una acción conjunta.
El nombre de Fernando Simón, actual director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, es el que más suena para dirigir el nuevo ente. Después de que varios medios de comunicación dieran su nombre, hasta el Ministerio de Sanidad ha dejado de hacer esfuerzos por desmentirlo (aunque tampoco lo ha confirmado).
Hay que recordar que, aunque el Centro Estatal de Salud Pública se ponga en marcha el próximo año, no es una idea que surgió de una pandemia.
Cuando el ex secretario general del Ministerio de Sanidad, José Martínez Olmos, puso en marcha la Ley General de Salud Pública en 2011 ya se contemplaba este organismo. La falta de presupuesto y la poca implicación por parte de los departamentos que sucedieron a Olmos (tanto del PP como del PSOE) lo han hecho imposible hasta ahora.