El ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, ha mantenido este lunes un encuentro "inspirador" con el Papa Francisco en el Vaticano y ha asegurado que al Pontífice y al Gobierno les "inspiran" los mismos valores, como el diálogo, la solidaridad y la ayuda a los que tienen más dificultades.
El ministro y el Papa se han reunido con dos temas como telón de fondo que afectan a la Iglesia española: la investigación de los abusos sexuales a menores y las inmatriculaciones. Sobre la primera cuestión, Bolaños ha asegurado que el Papa se ha mostrado receptivo en la protección de las víctimas y ha explicado que el objetivo del Gobierno es la reparación siempre con el diálogo con la Iglesia católica española como base.
Bolaños ha reconocido sentirse "honrado" y "muy agradecido" de haber tenido una conversación "inspiradora" con el Papa "durante casi una hora" y ha destacado que lo que más le ha "impresionado" es que es un "hombre bueno". "Cuando el mundo lo gobiernan las buenas personas, nos va mejor a todos", ha dicho el ministro este lunes en rueda de prensa posterior a su encuentro.
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Preguntado sobre los rumores de que el Papa pueda renunciar por sus problemas de salud, el ministro ha asegurado que le ha visto con una "fuerza y una capacidad para continuar con el pontificado fuera de toda duda" y "muy comprometido con continuar con sus reformas para acercar la Iglesia a la ciudadanía".
Plátanos, aceite, azafrán...
Tras su reunión, que ha durado 50 minutos, Bolaños le ha regalado al Papa plátanos cultivados en la isla de La Palma, una copia iluminada de un extracto de las Cantigas de Santa María del Rey Alfonso X, azafrán de Villafranca de los Caballeros (Toledo), y dos botellas de aceite de oliva de Jaén.
Con la visita de Bolaños, ya son cuatro los miembros del Gobierno que ha recibido el Papa, después de reunirse anteriormente con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, y la exvicepresidenta Carmen Calvo.
El encuentro de Bolaños con el Papa se produce dos días después de la Asamblea final de la fase diocesana del Sínodo, en la que la Conferencia Episcopal ha presentado una síntesis con las propuestas de los católicos para el Sínodo convocado por el Pontífice para octubre de 2023. Entre los asuntos que han planteado algunas diócesis, sobre los cuales, los católicos consideran que la Iglesia debe hacer una mayor reflexión se encuentran el celibato opcional o el sacerdocio femenino.
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Abusos sexuales
La reunión entre el Papa Francisco y Félix Bolaños se produce con varios temas de fondo que afectan a la Iglesia española como la investigación de los abusos sexuales a menores en el seno de la Iglesia española o las inmatriculaciones.
Sobre el primer asunto, está pendiente que se ponga en marcha la comisión liderada por el Defensor del Pueblo de la mano de un grupo de expertos para investigar los abusos acaecidos en el pasado en instituciones eclesiales. La creación de esta comisión fue aprobada por el Congreso de los Diputados el pasado mes de marzo, a propuesta del PSOE y el PNV, frente a la propuesta que habían presentado Unidas Podemos, ERC y EH Bildu para que fuera una comisión parlamentaria la que investigara estos abusos.
Respecto a las inmatriculaciones, Bolaños se reunió el 18 de enero de 2022 con el presidente de la Conferencia Episcopal Española y cardenal arzobispo de Barcelona, Juan José Omella, y acordaron intensificar el trabajo en este sentido. Bolaños no ha confirmado que se haya abordado esta cuestión en la reunión con el Papa.
Unas semanas después, el 24 de enero de 2022, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, visitó la sede de la Conferencia Episcopal y tras el encuentro, desde ambas partes, se dieron versiones opuestas. Según el Ejecutivo, habían acordado que 1.000 de los 34.961 bienes del listado de bienes inmatriculados hecho público por el Gobierno fueron inmatriculados indebidamente por la Iglesia, mientras que los obispos aseguraban que se trataba de 1.000 errores, un millar de bienes adjudicados erróneamente por el Gobierno a la Iglesia pero que no son suyos y, por tanto, no pueden devolver.