La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, quiere salvar la Navidad ante la subida de la incidencia del coronavirus y la aparición de nuevas cepas. Para ello, ha elaborado un plan que incluye el reparto de test de antígenos para todos los madrileños, la inversión de 40 millones de euros "extraordinarios" en "mantener" a los sanitarios en sus puestos de trabajo durante las vacaciones, y el inicio, a partir del próximo 15 de diciembre, de la vacunación en niños de 5 a 11 años.
Los test de antígenos se podrán recoger en las farmacias como las mascarillas que se repartieron durante la primera ola de la pandemia. Además, el Gobierno regional instará a las empresas a que hagan pruebas a todos sus empleados.
También se invertirán 40 millones de euros en prorrogar los contratos de los sanitarios fichados durante la pandemia para que sigan trabajando "como mínimo hasta que pase el invierno". Y en cuanto a la vacunación, con el inicio de la inmunización de los menores de entre cinco y 11 años, llega la tercera dosis a las personas de entre 60 y 69 años. Las citas previas podrán pedirse a partir de este jueves, 2 de diciembre.
"Lo que vamos a hacer es no generar confusión y actuar", ha señalado la presidenta regional, que también ha anunciado una campaña de concienciación en los medios con el lema "no te relajes". Así lo ha expuesto la presidenta regional desde el Hospital de Emergencias Enfermera Isabel Zendal, que ha cumplido este miércoles un año de vida.
8.400 pacientes
El 1 de diciembre de 2020, la presidenta regional inauguró el centro con la premisa de crear el primer "hospital de pandemias" de toda España, dedicado en exclusiva a descongestionar al Servicio Madrileño de Salud, entonces saturado, aunque su función ha variado a lo largo de sus 12 meses de existencia.
El Zendal fue construido tras seis meses de obras a un ritmo vertiginoso, y se inauguró cuando la pandemia asolaba España y se cebaba especialmente con Madrid. Ifema ya había cerrado, pero el invierno y la resaca de la segunda ola -la tercera ya asomaba- golpeaban fuerte a la población.
Díaz Ayuso dijo entonces del hospital que "asombraría al mundo" por sus modernas instalaciones y por su capacidad para atender de forma masiva a la población en plena pandemia. Y los datos le han dado la razón. Por sus pasillos, por sus camas y pabellones han pasado cerca de 8.400 pacientes infectados por el coronavirus. De ellos, 383 han sido atendidos en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) y 1.486 en la Unidad de Cuidados Respiratorios Intermedios.
Pese a ello, la izquierda política y mediática cargó duramente contra un hospital público que también sufrió sabotajes. Entre los ataques más repetidos, que no había suficiente personal sanitario, que se habían producido "traslados forzosos", y que las instalaciones eran deficientes. Más Madrid y Unidas Podemos llegaron, incluso, a pedir su cierre.
Terceras dosis
Este pasado lunes, según datos facilitados por el hospital, hay 102 personas ingresadas. Cifras que nada tienen que ver con las de hace tan sólo un año, y que permiten que desde el pasado 23 de febrero, el Zendal se haya dedicado principalmente a la vacunación. Desde esa fecha, se han inoculado más de 1.815.185 dosis, con un récord de 33.737 vacunas inyectadas en 24 horas el pasado 7 de julio.
Por la reducción de la incidencia, la Consejeria de Sanidad pudo dedicar uno de sus tres pabellones a la inmunización. Ahora, con el 92,1% de la población inmunizada con dos dosis y el 90,4% con al menos una, este macropunto de vacunación está centrado ahora en la administración de la tercera dosis, disponibles sin cita previa y durante las 24 horas del día. A partir de este próximo viernes, podrán hacerlo los adultos de entre 60 y 69 años.