Los presidentes de la Junta de Andalucía y la Generalitat Valenciana, Juanma Moreno (PP) y Ximo Puig (PSOE), anunciaron este martes la "alianza" contra la infrafinanciación de ambas autonomías, que son, con diferencia, las que menos fondos por habitante reciben del Estado. Ambos lanzaron una propuesta concreta para corregir este escenario a corto plazo: la creación de un "fondo transitorio" con "al menos 1.700 millones de euros" que el Gobierno de España destine de forma anual a los dos territorios.
"Hemos tratado de forjar una alianza por aquello que nos une y que nos urge", manifestó al respecto el presidente Puig, que subrayó que ambas regiones suman "casi un tercio de los habitantes de España, el 30%". "Hay que taponar la hemorragia financiera", reclamó Moreno. "Necesitamos medidas de carácter urgente, y la propuesta que hacemos nos ofrece una salida", agregó.
Los dos presidentes, sin abandonar la reivindicación de "acometer una reforma del sistema de financiación autonómica", abogan por esta solución "transitoria" para aliviar su infrafinanciación por habitante, que es de alrededor de 100 euros por cada residente en Andalucía y de 200 euros por cada habitante de la Comunidad Valenciana, según precisaron en su comparecencia.
En suma, Moreno Bonilla cifró la infrafinaciación de Andalucía en "800 millones según el ejercicio, en ocasiones ha ascendido a 900 o 1.000". En el caso de la Comunidad Valenciana el montante supera cada año los 1.300 millones de euros.
Murcia y Castilla-La Mancha
Tanto Puig como Moreno dejaron abierta su "alianza" a las comunidades autónomas de Murcia y Castilla-La Mancha. Ambas, aunque en "menor medida", se encuentran también entre las cuatro que reciben menos fondos por habitante que la media española. En caso de incorporarse a esta alianza, se trataría de dos territorios más gobernados por partidos distintos, PP y PSOE.
Sobre tal circunstancia, el hecho de que solo 4 de los 17 territorios se encuentran infrafinanciados, los presidentes andaluz y valenciano afirmaron que "no tiene por qué ser un impedimento". "No planteamos quitarle fondos a nadie. El resto de las comunidades autónomas tampoco están bien financiadas. Tenemos el ejemplo de la inversión en sanidad con la pandemia. Los gastos se han multiplicado de manera exponencial", argumentó Moreno.
Persiguen, por tanto, una mayor aportación por parte del Estado. El presidente Puig puso como ejemplo "el reparto de los fondos extraordinarios para hacer frente a los efectos de la Covid-19, que se ha realizado con criterios distintos a los del caducado sistema de financiación". En este caso, ha tenido un mayor peso la inversión por habitante, tal y como reclamaba la Comunidad Valenciana.