El independentismo catalán ha utilizado la jornada del lunes para salir en tromba a criticar al Tribunal de Cuentas, que mañana podría formalizar imputaciones a los líderes separatistas por el presunto uso inadecuado de fondos públicos en la promoción exterior del procés.
El órgano, que resuelve un expediente por la responsabilidad contable de cargos de la Generalitat como Raül Romeva u Oriol Junqueras ha recibido el enesimo ataque del independentismo por parte de este último, que ha asegurado que "mañana el Tribunal de Cuentas embargará la casa de nuestros hijos" y que "ninguna democracia del mundo se tendría que permitir el lujo de represaliar a los hijos de nadie": "Todos los represaliados serán libres".
Toda una coacción del líder de Esquerra Republicana de Cataluña (ERC), que se ha expresado así en el Consejo Nacional de ERC justo después de que el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, haya hablado de "inquisición económica" y "represión" en referencia a las investigaciones sobre el uso de fondos públicos para financiar el proceso separatista.
La prófuga Marta Rovira también se ha pronunciado sobre la "represión" del Tribunal de Cuentas y ha expresado que hay una "persecución política" contra los separatistas. "Mañana el Tribunal de Cuentas empezará a encausar familias injustamente", ha sostenido Rovira en una intervención telemática muy similar a la de Junqueras.
Y es que la concesión de los indultos a los nueve condenados por sedición y malversación no parecen haber rebajado sus pretesiones, que siguen amparando en la "independencia" y la "amnistía". Así las cosas, el vicepresidente de la Generalitar, Jordi Puigneró (JCat), ha advertido de que no darán gracias por los indultos a "un Estado que creía que encerrándonos limitaría lo que sois y lo que pensáis".
"Sois un referente para este país, habéis estado en la cárcel en nuestro nombre, en nombre de Cataluña. Os debemos el honor y el reconocimiento que merecéis", ha añadido Puigneró, quien considera que el referéndum ilegal, unilateral y sin garantías democráticas del 1-O no fue "ni un error ni un delito".
"Piedras del camino"
Todas estas declaraciones vienen precedidas por las polémicas palabras del ministro y número tres socialista, José Luis Ábalos, que se refirió a las investigaciones del Tribunal de Cuentas como "piedras del camino" que se deben "retirar".
Una expresión reutilizada por la ministra de Igualdad, Irene Montero, que ha abogado por "eliminar todo lo que no sea eminentemente, protagónicamente político": "El diálogo y el acuerdo".
La postura del Gobierno de España, expresada tanto por los socialistas como por los podemitas, no ha sentado bien en el Partido Popular. Su presidente Pablo Casado ha calificado como "el colmo" las palabras del Ejecutivo ante la actuación del órgano.
Y Casado ha añadido: "El Tribunal de Cuentas cumple su labor ¿O es que además de ver cómo indultan a los presos que han dado un golpe a la legalidad también tenemos que pagar su corrupción y su malversación de fondos públicos?".
Escandalizado, el líder de los populares ha vuelto a utilizar la interrogación retórica: "¿Pero esto qué es? ¿Esto es Venezuela? ¿Esto es Nicaragua? ¿Esto es Cuba? Apuntamos a los jueces, apuntamos a los fiscales que no cumplen las directrices políticas de Dolores Delgado [la Fiscal General del Estado] y ahora apuntamos a los señores miembros y vocales del Tribunal de Cuentas... yo creo que esto es algo de extraordinaria gravedad" ha concluido.