Podemos ha presentado este domingo su programa electoral, una especie de reedición del que presentaron en las elecciones del 28 de abril. Porque "las razones siguen intactas" pero "son más urgentes que hace seis meses". Los líderes que ha intervenido en la presentación han exigido "la derogación inmediata de la reforma laboral" para que "dormir bien no sea patrimonio de quien habita la Moncloa". Porque "hemos generalizado la precariedad, no la flexibilidad".
Pablo Iglesias ha justificado por qué su formación ha reeditado el programa electoral del 28-A, y ha propuesto un debate entre los responsables económicos de cada formación "para que se vea por qué Pedro Sánchez ahora habla como si fuese de Ciudadanos", en referencia a la "entrevista que hoy publica EL ESPAÑOL".
Iglesias ha respondido a Sánchez: "El presidente dice ahí que no va a subir los impuestos a la clase media... ¿pero quién ha propuesto eso? Nosotros lo que pedimos es que los bancos devuelvan el dinero del rescate y que el que tenga un millón de euros contribuya más... eso decimos". Y ha continuado con los lemas de campaña: "Él ha quitado la palabra izquierda de su programa del 28-A y ha puesto España, que es mucho más difícil de concretar. Si ahora, España, ¿antes qué? ¿Y luego?".
Irene Montero ha presumido del programa "coordinado por Pablo Echenique" aduciendo que el documento está hecho "pensando en España, no en el caladero de votos" al que su formación se quiere dirigir. Porque, según ella, otros lo hacen así y "en función de eso, pensar si vamos a decir que queremos derogar la reforma laboral o si en otras elecciones hacemos una entrevista en EL ESPAÑOL diciendo que la reforma laboral garantiza la flexibilidad necesaria del sistema cuando vienen tiempos de crisis", ha dicho refiriéndose a Pedro Sánchez.
Por eso, Montero cree que el hecho de que el programa de la formación morada sea el mismo prácticamente que el del 28-A es "responsabilidad" y lógica porque "lo nuestro es un contrato con quienes nos votan y con quienes no lo hacen" para poner "la vida y el planeta en el centro" y no "los intereses del Ibex-35". La propuesta de la número dos del partido, la que ha querido destacar, ha sido la reducción de la jornada laboral a 34 horas semanales "para que todos los padres y madres estén a las cinco de la tarde jugando con sus hijos".
Las propuestas destacadas del texto se concentran en las apuestas climáticas y económicas "porque es en el plan económico donde se ve si un partido es de izquierdas o no", dijo Montero. De hecho, la formación morada entrelaza lo verde y lo dinerario en una "auténtica revolución productiva", tal como ha anunciado Juantxo López Uralde -fundador de Equo y cabeza de lista por Álava-, primer líder en hablar este domingo en Madrid.
El plan llamado Horizonte verde prevé movilizar el 2,5% del PIB para esa "revolución" prevé romper el oligopolio energético y plantea tres planes: uno de energías renovables que prevé un 100% de renovables en 2040; uno de renovación de edificios que prevé 500.000 empleos; y otro de movilidad sostenible, para acabar con la contaminación, con el "impulso al ferrocarril como eje vertebrador del país".
Podemos propone crear una empresa pública de energía para romper con ese oligopolio, "herramienta necesaria para luchar contra el cambio climático y las puertas giratorias", verdadero poder en la sombra según la formación de Pablo Iglesias. Además, prevé una ley que fije precios mínimos en el sector agrario y un aumento e impulso de los parques nacionales, "que también creara miles de empleos".
Impuestos y recortes "por arriba"
Ésta es la apuesta principal del partido de Iglesias, que imbrica con el llamado Horizonte morado que se centra en las medidas apara hacer frente a la previsible recesión económica: crear un nuevo impuesto para las grandes fortunas con el objetivo de recaudar hasta un 1% del PIB de patrimonios superiores al millón de euros.
Este "new deal verde y morado" señala que los "recortes se harán por arriba" si viene la recesión. Y si no, también. Porque el plan es recaudar mucho más. Según el secretario de Economía, Nacho Álvarez, el estado español ingresa hasta ocho puntos menos por PIB -"unos 85.000 millones de euros"- que la media de sus socios europeos. Y el plan de Podemos es reducir esa brecha, "al menos en la mitad", ha dicho Álvarez, "para financiar los servicios sociales básicos y blindar a los de abajo, con un escudo social".
El documento, que quiere hacer frente a una nueva crisis económica "con garantías", incluyen también un impuesto sobre los beneficios de las grandes empresas por contaminar, el impuesto a la banca que aumente 10 puntos el tipo impositivo de las entidades financieras o eliminar privilegios fiscales de grandes corporaciones con un tipo mínimo efectivo del 15%.
Además, al igual que en abril, Podemos exige derogar tanto la reforma laboral de José Luis Rodríguez Zapatero de 2010 como la de Mariano Rajoy de 2012. De hecho, el partido de Iglesias reaccionaba indignado a las palabras del presidente en funciones, Pedro Sánchez, en su entrevista en EL ESPAÑOL, en palabra de Montero, de Nacho Álvarez, secretario de Economía del partido, y del propio Iglesias. Reclama un ingreso básico garantizado de al menos 600 euros al mes, alcanzar en la legislatura un salario mínimo interprofesional (SMI) de 1.200 euros y que la jornada laboral sea de 34 horas semanales.
Servicios sociales
Ione Belarra ha defendido un blindaje de los servicios sociales: "Una sanidad pública verdaderamente universal" y el fin de la financiación de los colegios "que segregan por sexos en pleno siglo XXI". Belarra ha reclamado "una educación pública gratuita de 0 a 3 años, garantizarla en comedores y material también en primaria y ESO, y ampliar la gratuidad a la universidad". En esto ha abundado Pablo Echenique, recordando que "los recortes en innovación nos han hecho retroceder dos décadas en inversión y lo que hay que hacer es o contrario".
Belarra ha reclamado intervenir el mercado del alquiler, con una burbuja "generada de manera artificial" y "acabar ya con los desahucios sin alternativa habitacional", que son, ha dicho, "ilegales a nivel internacional". Según la coportavoz parlamentaria de Unidas Podemos "eso es lo que más comparten Sánchez y Torra, cómo echar a la gente de sus casas con operativos policiales".