La vicepresidenta del Gobierno en funciones, Carmen Calvo, ha defendido el movimiento de María Chivite en Navarra para gobernar Navarra en coalición con Geroa Bai, Podemos y el apoyo de Izquierda-Ezkerra, aun cuando necesita la abstención de EH Bildu. A su juicio, supone buscar la gobernabilidad para Navarra y sacar adelante un gobierno con partidos con los que se sientan en otros Ayuntamientos.
Y ante las críticas por parte de Navarra Suma, Calvo ha insistido en que su "adversario natural" son "las derechas". Según la vicepresidenta, se debe diferenciar facilitar la gobernabilidad de las instituciones y otra compartir políticas y programa.
En una entrevista en RNE, recogida por Europa Press, la vicepresidenta ha recalcado que el PSOE "nunca" ha negociado con la formación abertzale. "Con Bildu no compartimos las ideas de Bildu, es clarísimo esto", ha recalcado. Así, ha respondido a las críticas del PP asegurando que quien pactó con ellos fue Javier Maroto e invitaba a otras fuerzas a hacerlo. "El PP tiene que dejar de ser hipócrita", ha cargado.
Calvo ha insistido en que durante la etapa de Maroto al frente del Ayuntamiento de Vitoria, el 'popular' reivindicó sus pactos con los abertzales. A su juicio, el PP utiliza la situación en Navarra con fines electoralistas en el resto del país.
"Eso está en la hemeroteca", ha recordado, y ha apelado a su responsabilidad sobre la unidad de España y territorial. "No parece responsable que utilicemos esto para el resto del país, que se pueden sentir unos manipulados y otros inquietos", ha incidido.
"Si PP y Ciudadanos usan constantemente los asuntos territoriales para fines de crecimiento electoral, poniendo en dificultades la viabilidad de las instituciones, serán responsables", ha añadido Calvo, que ha acusado al PP de usar "elementos impropios" para criticar al PSOE.