El PP ya no sabe cómo apelar al voto útil para frenar la fragmentación de la derecha. Las palabras de Pablo Casado no parecen surtir efecto: las encuestas auguran el triunfo del PSOE gracias a un centro derecha dividido con un Vox cada vez más disparado.
Los nervios en Génova han llevado a los dirigentes populares a atacar dialécticamente a Santiago Abascal, en una estrategia hasta ahora desconocida. Pero parece que esa nueva retórica no es suficiente. Tanto es así que varios simpatizantes del partido conservador han empezado a difundir un vídeo en redes sociales para hacer pedagogía entre los posibles votantes de Vox desencantados con el proyecto del PP. El objetivo es argumentar que “votar a Vox es votar a Sánchez”.
En el vídeo, que corre ya como la pólvora en los grupos de WhatsApp, aparecen los míticos personajes de Epi y Blas hablando de política. El primero está convencido de votar a Vox el 28-A, algo que enfada –y mucho- a su amigo Blas.
Epi: Voy a votar a Vox para echar a Sánchez de la Moncloa.
Blas: Pero ¿que dices, ¿Epi? ¿Tú no sabes cómo funciona la Ley D’Hont?
Epi: No lo sé. Sólo quiero quitarle las llaves del Falcon.
Entonces un Blas irritado empieza a enseñar a su compañero que al votar a Vox “estás apoyando a Sánchez y a toda la tropa de independentistas”. Blas sigue sin entender nada. Y Epi, cada vez más enojado, decide utilizar un ejemplo para ilustrar a su inseparable amigo.
“Es muy fácil. En nuestra provincia de Barrio Sésamo se necesitan 1.000 votos para conseguir un escaño. Imagina que un partido constitucionalista tiene 998, pero Don Pimpón y tú votasteis a Vox [2 votos]. Ni un partido ni otro consiguen escaño. Y todos esos votos se pierden.
“Si esto mismo ocurriera en muchas provincias”, extrapola Epi, “se perderían cientos de miles de votos y Sánchez y Begoña seguirían en el Falcon”.
Blas, aburrido quizás de la larga lección, decide largarse de la escena. “¡No huyas!”, le grita Epi. “Aprende a votar con la cabeza utilizando la Ley d’Hont porque si votas a lo loco en vez de echar al okupa de La Moncloa se comprará otro colchón y seguirá riéndole los chistes a los separatistas”, vocifera un malhumorado Epi mientras las imágenes muestran a Begoña Gómez como la cerdita Peggy junto al presidente Sánchez, retratado como Coco.
El PP se desentiende del vídeo
Se trata, en cualquier caso, de una campaña no difundida por los canales oficiales del partido pero que sirve para "explicar cosas complejas de manera que todo el mundo las entienda", según declaran fuentes del PP a eldiario.es. "El PP no tiene ninguna relación con la producción del vídeo", puntualizan.
Sin embargo, varios diputados y cargos públicos del PP han compartido en Twitter el vídeo de Barrio Sésamo. Es el caso de Isabel Cabezas, diputada popular por Córdoba, o Pilar Marcos, diputada por Madrid.