Segundo gran acto de Ciudadanos en precampaña electoral y segunda vez que el presidente del partido, Albert Rivera, cede protagonismo a la portavoz nacional, Inés Arrimadas.
Ocurrió el pasado sábado, en el acto durante el que Arrimadas confirmó su desembarco en Madrid como candidata de Barcelona para el Congreso. Ha vuelto a ocurrir este domingo, cuando la portavoz de Cs ha presentado el Manifiesto por el Feminismo Liberal en el que Cs marca distancias con los partidos de la derecha (PP y Vox) con su defensa de los derechos individuales y come terreno al PSOE por el centro con un feminismo "liberal y moderno", como ellos mismos lo han definido.
Tratan de llegar así a las mujeres que no se sienten identificadas con quienes "dicen portavozas y reparten carnés de buena feminista", como afirmó Arrimadas en clara alusión a las políticas del PSOE, y reivindican a Clara Campoamor, Michelle Obama y a sus propias madres y abuelas como referentes.
¿Estamos ante una estrategia de ticket político, de tándem ganador? En Estados Unidos, esa táctica consiste en que el candidato a la presidencia elija a un compañero para la vicepresidencia que le complemente, que llegue a los sectores de votantes entre los que tiene menos predicamento. Así lo hicieron por ejemplo el joven Barack Obama y el veterano Joe Biden, con quien llegó a establecer una relación prácticamente de iguales en la Casa Blanca. Una baza parecida parecen estar jugando también Rivera y Arrimadas para arañar votos al PSOE.
Batalla abierta contra el PSOE
Precisamente desde que arrancó la precampaña los representantes socialistas han convertido a Cs en la diana de sus ataques, intentando sacarles de la defensa de los derechos y libertades que efectivamente defienden y comparándoles con Vox y PP con el término ya acuñado de la "triderecha", con el que meten a todos en el mismo saco.
Pero este domingo en Madrid Arrimadas y Rivera trazaron una estrategia para lanzar un torpedo al buque feminista del PSOE. En un orquestado acto, Arrimadas fue la presentadora de un debate abierto en el que las mujeres de Cs -Begoña Villacís, las diputadas Patricia Reyes y Marta Rivera o la consejera de Igualdad andaluza Rocío Ruiz- fueron las protagonistas.
En ese marco, lanzaron el decálogo con el dejan claros sus objetivos feministas: lucha por la erradicación de la violencia de Género, inclusión del hombre para alcanzar más derechos laborales compartidos y regulación de la maternidad subrogada y la prostitución. Una batería de intenciones, todavía ningún objetivo concreto, con el que se plantan ante "quienes piensan que tienen el monopolio en la lucha contra la violencia machista" porque "el feminismo no es de los partidos, es de la sociedad", se encargó de resaltar Arrimadas.
Sólo al final, y agradeciendo a su escudera y al resto de compañeras su trabajo, Rivera intervino para llamar a los hombres a luchar al lado de las mujeres.