El discurso de Nochebuena de Felipe VI, conciliador, con numerosas referencias a la "convivencia" y el "espíritu" de la Transición, pero ninguna alusión directa a Cataluña ni a la crisis de Estado por el conflicto territorial, no ha resultado creíble ni adecuado para los partidos separatistas y republicanos.
El año pasado, tanto Podemos como los independentistas consideraron que el Rey se había "aliado con los partidos de derechas en su estrategia represiva" por llamar al cumplimiento de las leyes.
Este año que el jefe de Estado ha optado por un discurso light y pasar de puntillas por el conflicto territorial, para centrarse en los jóvenes y en un futuro de España en el que "todos" respeten "las reglas", les parece que no debería haberse olvidado de Cataluña y le tildan de "inmovilista".
"No tiene legitimidad"
El presidente del Parlament, Roger Torrent, ha afirmado que tanto el discurso de 2017 de Felipe VI -posterior al referéndum ilegal celebrado en Cataluña y al encarcelamiento de los responsables del procés- como el de 2018 "no hacen más que reafirmarnos en la necesidad de la República catalana".
El político de ERC ha cargado este martes, día de Navidad, contra Felipe VI y ha afirmado que "un rey que avala la represión no tiene legitimidad en Cataluña".
"No resulta creíble"
Tanto Podemos como Izquierda Unida, partidos que se declaran republicanos, consideran que Felipe VI ha intentado acercarse a sectores en los que la Monarquía no tiene aceptación y no ha resultado creíble.
"He escuchado un discurso borbónico sin credibilidad y voluntarista (por ejemplo, las menciones a la motivación, ilusión y esfuerzo de los jóvenes son propias de un coach). Es el discurso de quien sabe que tiene adaptarse pero no termina de saber ni hacia dónde ni cómo", ha publicado el coordinador federal de Izquierda Unida, Alberto Garzón, en las redes sociales.
En el mismo sentido se ha manifestado el secretario de Organización de Podemos, Pablo Echenique, que considera que el Rey habló de jóvenes y mujeres desde una institución antigua y machista.
El secretario general de la formación morada, Pablo Iglesias, ha visto incluso en el discurso de Felipe VI una rectificación. Asegura que en el discurso posterior a la declaración de independencia en Cataluña, el Rey opinó sobre política, algo que "no se espera de un monarca" según Iglesias.
"La Constitución no integra a todos"
La portavoz del BNG, Ana Pontón, ha calificado de "inmovilista y carente de sensibilidad para el momento social y político que se está viviendo" el discurso del Rey, mientras que el portavoz del PNV en el Congreso de los diputados, Aitor Esteban, echa en falta que Felipe VI hablara del conflicto territorial, tanto de Cataluña como del País Vasco.
Esteban ha criticado que el Rey dijera que la Constitución es el mayor "legado" para las nuevas generaciones: "Ese no es el mayor legado para las nuevas generaciones vascas". "El mayor legado para la nueva generación vasca sería que se reconociera a los vascos como una nación propia", ha asegurado en rueda de prensa.
La diputada de EH Bildu, Marian Beitialarrangoitia, ha sido aún más crítica. Directamente ha dicho que Felipe VI "olvida que sin derecho a decidir no hay democracia" y ha afirmado que se mostró como "el máximo representante de un marco constitucional que niega a gallegos, catalanes y vascos su derecho a decidir".