Los valencianos lucharon contra las tropas franco-españolas en la Guerra de Sucesión. Esa es la visión que, desde hace unas semanas, trasladan las Cortes Valencianas de ese episodio histórico. Lo hacen a través del cuadro La batalla de Almansa, óleo pintado por Buonaventura Ligli y Filippo Pallota (1709), que representa la pugna entre las tropas favorables a Felipe de Anjou y las del archiduque Carlos de Austria.
La cartela con la que el presidente del Parlamento valenciano, el nacionalista Enric Morera, acompaña la obra cedida por el Museo del Prado, afirma que "valencianos, ingleses, portugueses y holandeses" combatieron juntos el 25 de abril de 1707 con el ejército del derrotado Carlos de Austria en Almansa (Albacete), mientras que el resto de españoles lucharon del lado del monarca francés. Esta interpretación de los hechos, que es imposible localizarla en los manuales de Historia, ha provocado asombro.
El cartel explicativo del cuadro ha sido modificado recientemente, y lo ha hecho para alentar en Valencia la misma tesis sin base científica del nacionalismo catalán, que defiende que la población era austracista y luchaba por independizarse de España. La prueba de que no fue una guerra de castellanos contra catalanes, es que hubo enfrentamiento armado entre los propios catalanes, con "los vigatans", de un lado, y "los borbónicos –apodados botiflers–", del otro, recuerda el historiador Jorge Vilches. Es más, en el resto del país también hubo partidarios de Carlos de Austria: Madrid y Toledo, por ejemplo, fueron austracistas.
Nacionalismo catalanista
El presidente de las Cortes Valencianas, responsable del cambio de la cartela, fue el encargado de clausurar el sábado pasado un homenaje a los encarcelados por el golpe separatista en Cataluña. Enric Morera denunció el “encarnizamiento con los presos políticos de Cataluña” y se dirigió al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para pedirle que intervenga en su favor. Compromís, el partido de Morera, de vocación catalanista, tiene un pacto de Gobierno con el PSOE en la Comunidad Valenciana.
Lo cierto es que en la batalla de Almansa no hubo valencianos. Fue un combate entre ejércitos internacionales comandados por generales extranjeros y no "entre españoles y catalanes", como ratifica Ricardo García Cárcel, catedrático de Historia Moderna de la Universidad Autónoma de Barcelona y Premio Nacional de Historia.
En el imaginario colectivo está que Felipe V fue un rey opresor, por cuanto abolió los Fueros de Aragón y Valencia. No obstante, también derogó muchas trabas comerciales y unificó normativas, lo que benefició a los puertos mediterráneos. El PP valenciano ya ha exigido que se modifique el texto que acompaña al cuadro de La batalla de Almansa para que no se trate de enfrentar a los valencianos del resto de los españoles.