La Policía Nacional ha anunciado este viernes la desarticulación en el marco de la conocida como Operación "Barrido" de una red de venta de estupefacientes de Santiago de Compostela que se extendía por varios municipios de la provincia de Pontevedra, con un total de 25 detenidos que podrían ser más, ya que todavía no se ha dado por concluida.
La operación, enmarcada en el plan global para la preparación del Año Santo Xacobeo 2021 de la comisaría de Santiago, comenzó a finales de 2019, después de que los agentes recibiesen numerosas denuncias por la existencia de un "punto negro" de venta de droga en la zona de San Roque, en la capital gallega.
La titular del Juzgado de Instrucción número uno de Santiago ordenó la investigación de esta circunstancia, aunque la "repercusión mediática" del caso llevó a que los integrantes de la red "se dispersaran por otros lugares de la ciudad", estableciendo nuevos puntos de venta en el Casco Histórico y en la zona de Pelamios, donde además "ocuparon ilegalmente varios inmuebles".
Así, la Policía Nacional logró identificar a los tres proveedores de esta red, que distribuía mayoritariamente cocaína y heroína. El primero de ellos era un vecino de Santiago "con numerosos contactos" en la zona de Padrón, Cambados, Ribeira, Cee e incuso en Madrid.
El segundo de los proveedores era otro varón -de origen dominicano- que, "en connivencia con su hermano", era responsable de distribuir cocaína en la zona del Ensanche de Santiago.
Sin embargo, la "sorpresa" para los agentes llegó con el tercero de los proveedores: una vecina de Mos (Pontevedra) de 70 años que se había establecido en un "piso franco" en la localidad de Milladoiro, en Ames, junto a Santiago, desde donde se desplazaba a la ciudad varias veces por semana "con el fin de abastecer de cocaína y heroína a otros traficantes de menor entidad".
Asimismo, también se identificó a la persona que abastecía a la traficante septuagenaria: otro vecino de Mos de 68 años con antecedentes por tráfico y que había establecido contactos con otros distribuidores de localidades de Pontevedra, donde adquiría la droga que posteriormente proporcionaba a la mujer.
La Policía Nacional ha destacado la "complejidad y envergadura" de la operación, con 25 arrestos en Brión, Mos, Salceda de Caselas, O Porriño y, sobre todo, en Santiago, donde se desarticularon 14 puntos de venta en las zonas de San Roque, Ensanche, Fontiñas, Conxo, San Pedro, Casco Histórico, Belvís, San Caetano y Pelamios.
El total de droga intervenida asciende a 400 gramos de cocaína, 300 de heroína, 100 de marihuana, 75 de hachís, 150 pastillas de metadona y 700 gramos de sustancia de corte, a los que se suman 60.000 euros en efectivo, 18 básculas de precisión, 26 teléfonos móviles, una pistola detonadora, tres envasadoras de vacío, joyas y dos vehículos.
Durante el desarrollo de la operación policial también se liberaron dos viviendas ocupadas ilegalmente en las zonas de Pelamios y Pexigo de la capital gallega, a la vez que se recuperaron dos bicicletas y un ordenador portátil de supuesta procedencia ilícita.
Los 25 detenidos han sido imputados por tráfico de drogas y pertenencia a grupo criminal y 13 de ellos han ingresado en prisión. No se descartan más arrestos, toda vez que la operación no está concluida.