El Partido Popular ha anunciado que sus grupos municipales en todos los Ayuntamientos, Diputaciones y Parlamentos autonómicos de España presentarán mociones para reclamar una "financiación justa y solidaria". La medida trata de combatir el concierto fiscal contemplado en el acuerdo entre el PSC y ERC que permitió la investidura de Salvador Illa como presidente de la Generalitat de Cataluña.
El encargado de presentar esta propuesta ha sido el vicesecretario de Coordinación Autonómica y Local y Análisis Electoral del PP, Elías Bendodo, que ha estado este miércoles en Toledo junto al presidente del partido en Castilla-La Mancha, Paco Núñez.
La iniciativa parte de esta Comunidad -en la que su presidente, el socialista Emiliano García-Page, también se ha manifestado en contra del pacto con los independentistas-, pero está enfocada a todos los Ayuntamientos, Diputaciones provinciales y Parlamentos autonómicos de España.
El PP apela a sus grupos autonómicos, provinciales y municipales a presentar dichas mociones en sus respectivos plenos con el objetivo de "defender la igualdad y la solidaridad como principios irrenunciables del ordenamiento constitucional y del Estado autonómico en la toma de decisiones".
El texto de esas mociones viene con un modelo redactado por la dirección del Partido Popular e incluye 11 puntos. Entre ellos, se reclama la convocatoria de manera urgente la Conferencia de Presidentes, así como del Consejo de Política Fiscal y Financiera y la Comisión Nacional de Administración Local (CNAL) para "promover una reforma del sistema de financiación local conjuntamente con la financiación autonómica".
El objetivo último es "paralizar cualquier avance hacia la independencia fiscal solicitada por el separatismo y exigir garantías de que ninguna Comunidad del actual sistema de régimen común sale del mismo ni se fragmenta la Agencia Tributaria".
El PP también reclama, entretanto, ampliar la cuantía dineraria del actual sistema de financiación autonómica. La idea es crear un fondo transitorio que palíe la infrafinanciación de algunas autonomías, garantizar el manejo de los fondos de recuperación europeos que llega a los Ayuntamientos o disponer de forma rápida de 18.000 millones de los fondos Next Generation que -según el PP- el Gobierno aún no ha ejecutado.
De esta forma, el Partido Popular abre el espectro de una batalla, hasta ahora, centrada por el Gobierno en la reforma del modelo de financiación autonómico, nacido del acuerdo en Cataluña. No sólo en cuanto a los temas, sino también en el ámbito geográfico.
Los populares quieren sacar el debate más allá del Congreso o del ámbito autonómico, como ya lo han hecho la mayoría de presidentes de Comunidades gobernadas por el PP, y llevarla a cada territorio, pegados al ciudadano en la política local.
Las mociones presentadas en los consistorios no tendrían ningún efecto inmediato, pero sí que trasladarían esa presión al Gobierno.
Un pacto de Estado
"La colección de cesiones ya asumidas por el presidente del Gobierno para asegurar su continuidad en la Moncloa ha provocado un deterioro sin precedentes de la salud de nuestro Estado de derecho", ha afirmado Bendodo durante la presentación de esta iniciativa.
Según sus palabras, "el objetivo final del independentismo es hacerse con el control financiero, la llamada 'llave de la caja', para seguir impulsando el desafío del procés mediante nuevos mecanismos".
El PP critica que el pacto entre el PSC y ERC rompe el principio constitucional de igualdad y la solidaridad territorial, por lo que trata de alinear a todos sus órganos estatales, autonómicos y locales en la misma dirección.
También lamenta que Vox no apoyara una iniciativa presentada por el PP en el Congreso contra el modelo de financiación catalán y pide al PSOE sumarse "a un pacto de Estado contra el troceamiento de nuestro país".