Juan Carlos I, Felipe VI y doña Letizia en la Catedral Castrense en el funeral por Juan Gómez-Acebo.

Juan Carlos I, Felipe VI y doña Letizia en la Catedral Castrense en el funeral por Juan Gómez-Acebo. E.P.

España CASA REAL

Felipe VI rechazó hace dos años unirse a la fundación a la que Juan Carlos quiere derivar su patrimonio

Juan Carlos I lleva trabajando en este asunto desde hace tiempo y "no ha sido una tarea fácil". El objetivo es transferir de forma más sencilla su herencia a las infantas Elena y Cristina.

10 septiembre, 2024 02:28

"El rey Felipe era conocedor de la idea de su padre, Juan Carlos, de crear esta nueva fundación, pero desde el principio renunció a tener participación en su patronato o consejo". Así de tajante se muestran fuentes cercanas al equipo de Zarzuela para referirse a la decisión del Emérito de constituir una fundación en Abu Dabi para poder transferir su herencia a las infantas Elena y Cristina.

Fuentes próximas a la Casa Real aseguran que Juan Carlos I llevaba trabajando en este asunto desde hace casi dos años: "No ha debido de ser una tarea fácil; han hecho muchos viajes a Oriente Próximo para poder recopilar todo el patrimonio que tiene guardado fuera de nuestras fronteras".

El Rey Emérito creó la citada fundación para, bajo la premisa de promover sus casi cuatro décadas de reinado, transferir de forma más sencilla su herencia a las infantas Elena y Cristina. El patronato está formado por el propio Juan Carlos, sus hijas y el abogado de este.

El argumento que ha dado el Rey Emérito para justificar ese paso es asegurar a sus hijas y a sus nietos los ingresos suficientes cuando fallezca y que no vean mermado su nivel de vida.

Además de la casi nula fiscalidad de este tipo de fundaciones en la capital de Emiratos Árabes Unidos se suman el secreto en torno a sus normas de funcionamiento y la verdadera titularidad de los bienes. Una vez fallezca Juan Carlos, las hijas pasarían a controlar el patrimonio de la sociedad. No así su hijo Felipe, que renunció a la herencia.

"En realidad, las hermanas del Rey no van a tener ningún problema para seguir con su actual ritmo de vida, son mujeres independientes que ganan un buen sueldo, entre 300.000 y 400.000 euros anuales. Al crear esta sociedad, de lo que se asegura el exjefe del Estado es de que salgan a la luz todos los fondos que tiene en el extranjero, en Abu Dabi, Londres o Suiza, y que sean legales para que sus hijas los puedan recibir como herencia en el futuro", añaden las fuentes.

Renuncia en 2020

Felipe VI ya renunció a la herencia de su padre en 2020. El periódico británico The Telegraph reveló el 14 de marzo de ese año que Juan Carlos I había recibido años atrás 100 millones ingresados en otra fundación opaca, la panameña offshore Lucum, y que el mismo Felipe VI era el segundo beneficiario, sin éste saberlo.

Al día siguiente, con toda España confinada por la pandemia de la Covid, el jefe del Estado enterró la herencia de su padre y le apeó del reino con el siguiente comunicado de Casa Real"S.M. el Rey quiere que sea conocido públicamente que S.M. el Rey Don Juan Carlos tiene conocimiento de su decisión de renunciar a la herencia de Don Juan Carlos que personalmente le pudiera corresponder, así como a cualquier activo, inversión o estructura financiera cuyo origen, características o finalidad puedan no estar en consonancia con la legalidad o con los criterios de rectitud e integridad que rigen su actividad institucional y privada y que deben informar la actividad de la Corona".

Felipe VI dejó constancia ante notario de que nada sabía y de que renunciaba a cualquier herencia de su padre. Ese día comenzó la muerte civil de Juan Carlos I, que culminó el 3 de agosto de ese año, cuando se anunció la marcha del Emérito de España. Desde entonces, está instalado en Abu Dabi

Por qué ahora

La creación de esta fundación responde a la preocupación del Emérito por la situación de sus hijas una vez él muera, dado que ni Elena ni Cristina reciben asignación económica de los Presupuestos Generales del Estado desde que dejaron de formar parte de la Casa Real en el 2014.

La infanta Elena trabaja en la Fundación Mapfre y percibe un salario de unos 300.000 euros anuales, mientras que su hermana menor ingresa unos 400.000 euros de la Fundación Aga Khan, con sede en Ginebra. 

El Emérito es el presidente de la nueva fundación y las hermanas de Felipe VI formarán parte del patronato, aunque no serán las únicas: varios amigos de don Juan Carlos, sobre todo grandes empresarios, tendrán una plaza en el consejo.

El segundo objetivo de la fundación, además de garantizar el cobro de la herencia a las infantas, es reconocer los logros del reinado de Juan Carlos y tratar de restaurar su figura tras los escándalos que han dañado su reputación en los últimos años.

Según las fuentes consultadas, la noticia de la creación de la fundación ha sido filtrada por el propio Emérito a través de su bufete de abogados, que ha hecho todos los trámites legales para que la fundación sea una realidad.