El proyecto de creación de la llamada "frontera inteligente" en el paso fronterizo de Melilla va a retrasarse como mínimo hasta 2023, un año más de lo previsto y de lo anunciado por el ministro Fernando Grande-Marlaska.
En una respuesta parlamentaria del Gobierno al Partido Popular, a la que ha accedido EL ESPAÑOL, el Ejecutivo reconoce que existe "cierta complejidad" desde "el punto de vista de la ejecución" del proyecto: "No solo afecta al Ministerio del Interior, sino que, además, recoge las necesidades demandadas por otros ministerios que prestan su servicio en el paso fronterizo de Beni Enzar".
Ese tramo del vallado es precisamente donde se produjo la tragedia del pasado 24 de junio. Según las cifras oficiales fallecieron 23 personas en el salto multitudinario a la valla. Las ONG que han indagado sobre la tragedia aseguran que la cifra supera con facilidad la treintena.
"Las obras se han iniciado en el mes de septiembre, estando previsto una duración de 12 meses, estimándose como fecha de su finalización el último trimestre de 2023", informa ahora el Gobierno.
En un desayuno informativo con Europa Press el pasado mes de abril, al ser preguntado por la puesta en marcha de la frontera inteligente, Marlaska aseguró que estaría lista "a finales de año". Destacó el "trabajo" realizado y "la inversión de 50 millones" que ha supuesto para la Administración. Esa promesa, a tenor de lo que Marlaska garantizó, no se va a poder cumplir.
La 'frontera inteligente'
En esta nueva frontera resultará fundamental la inteligencia artificial. Entre otros aspectos, se instalará un "sistema inteligente" que controle quién entra y quién sale de la ciudad mediante el reconocimiento biométrico y facial de cada una de las personas que accedan a Melilla.
Esta tecnología facilitará el trabajo de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. Gracias a ella controlarán el tránsito en frontera sin hacerlo tan solo de forma manual.
El objetivo básico de la llamada 'frontera inteligente' es evitar el paso de visitantes que no cumplan las condiciones de entrada. Así, el sistema indicará qué personas sobrepasan el periodo de estancia autorizado. También ayudará a identificar a aquellos que intenten entrar con identidad falsa, y contribuirá a detectar si en su historial figuran determinados delitos (como los relacionados con el terrorismo) para poder disponer rápidamente de esa información antes de permitirles el paso.
Más deficiencias
A la espera de que esta "frontera inteligente" sea construida, hay que sumar las "graves deficiencias" que presenta la valla de Melilla, las cuales se han hecho patentes este 2022 con dos saltos masivos que la Guardia Civil no fue capaz de contener.
Este mismo año, el Ministerio del Interior reconocía esas carencias. Como publicó EL ESPAÑOL, el departamento de Marlaska está acometiendo varias reformas que mejorarán la seguridad en el acceso desde Marruecos a la ciudad autónoma. En uno de los contratos con los que Interior quiere blindar Melilla ponía el acento en darle "prioridad a la implementación urgente de las deficiencias en los pasos fronterizos", que se consideraban "graves teniendo en cuenta la presión migratoria en esta frontera".
Así consta en la memoria del contrato con el que Interior pretende instalar un sistema integral de vigilancia para la Comandancia de la Guardia Civil de la ciudad.
Tras esta reforma se dotará de cámaras y tecnología militar de última generación a la verja de la ciudad autónoma.
Las carencias del vallado descritas por la Guardia Civil se focalizan mayormente en el paso fronterizo de Beni-Enzar. En la frontera de Melilla con Marruecos, dentro del territorio marroquí, "se van formando bolsas de inmigrantes que intentan entrar de algún modo ilícito en territorio español, bien a través de los pasos fronterizos, la valla perimetral o por los espigones de la frontera marítima", explica uno de los informes aportados al procedimiento de adjudicación de la frontera inteligente.
"En el caso de esta comandancia, supone un punto crítico de entrada a través de las fronteras españolas". A renglón seguido, se admite que "los medios utilizados en esta área no son suficientes y deben ser reforzados".
Todo ello, estima la Guardia Civil, resultará "eficaz para la detección control y seguimiento de inmigrantes, tanto de día como de noche, garantizando una vigilancia de las fronteras eficaz y reactiva". Pero ni esta reforma ni ninguna de las otras que allí se acometen se completarán hasta finales del año que viene.