El Rey ha pedido este miércoles defender los derechos, libertades y convivencia conseguidos en democracia frente a cualquier amenaza que pueda poner en riesgo esas conquistas.
Felipe VI ha lanzado esa llamada en la inauguración del III Foro La Toja-Vínculo Atlántico en presencia, entre otros, de dos expresidentes del Gobierno, Felipe González y Mariano Rajoy, de la vicepresidenta primera del Ejecutivo, Nadia Calviño; el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares; y el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo.
También ha estado presente el ex secretario general de la OCDE Ángel Gurría, a quien el monarca ha entregado el primer premio que lleva el nombre del foro.
Ante todos ellos ha señalado que la sociedad internacional está siendo testigo de numerosos cambios en el orden geopolítico global caracterizado desde comienzos de siglo por la aparición de nuevos actores, equilibrios de poder y escenarios "que generan una mayor incertidumbre y una mayor dificultad en la gobernanza de todos los niveles".
"Por eso el aislacionismo no es una buena opción", ha añadido antes de precisar que la pandemia del coronavirus y sus consecuencias han propiciado que muchas de esas transformaciones sucedan con más intensidad.
En ese contexto ha señalado que los analistas advierten de que "en la actualidad hay una erosión del multilateralismo, el retorno de las tendencias proteccionistas, el poder de las técnicas de desinformación, la volatilidad del orden internacional o el decaimiento de los valores tradicionales".
Frente a todo ello, ha considerado que es cuando más hay que hacer "para defender la libertad y los valores que nos han permitido la democracia" y más hay que avanzar en la construcción de sociedades abiertas.
"Lo conquistado en derechos y libertades, en seguridad, en convivencia y en oportunidades, debe prevalecer frente a cualquier amenaza que pueda poner en riesgo lo que tanto costó alcanzar. No podemos permitir -ha añadido- que se asiente una percepción accidental o coyuntural de esas conquistas".
Una reflexión tras la que ha concluido: "Todos somos parte y tenemos mucho que hacer para salir adelante".
Para el rey, los nuevos tiempos requieren un reforzado y más eficaz enfoque multilateral, enfoque ante el que cree que es esencial el fortalecimiento del vínculo atlántico.
Esa referencia le ha llevado a recordar la celebración en 2022 en Madrid de la cumbre de la OTAN.
También se ha referido a la relación con América Latina para señalar que tanto España como Portugal han de ser "proactivos" para un diálogo que apoye y consolide instituciones democráticas y sociedades abiertas.
Felipe VI ha dedicado un capítulo de su intervención a las consecuencias de la pandemia para señalar que se está en un momento en el que hay motivos de inquietud pero también de esperanza que ha ligado al proceso de vacunación.
"Ahora podemos encarar con más optimismo, no exento de obligada prudencia, el fin de la crisis provocada por la pandemia (...) La pandemia nos ha golpeado de manera desigual y, por ello, en el momento de la recuperación, es preciso ser especialmente sensibles y atentos con quienes peor lo han pasado", ha recalcado.
El rey ha aprovechado su intervención para dar la enhorabuena a Gurría por la distinción que ha recibido y para elogiar su labor en favor de una comunidad internacional más justa y equitativa.