Los CDR vuelven a la calle tras la Diada: "Quieren que nos quedemos en casa pero es la lucha directa"

Los ataques perpetrados durante la Diada contra la Jefatura Superior de Policía Nacional en Vía Laietana, en el centro de Barcelona, han puesto de relieve el regreso de la actividad violenta a las calles de Barcelona. Una actividad, según revelan fuentes policiales a EL ESPAÑOL, que estaría nuevamente capitaneada por los Comités de Defensa de la República (CDR).

"Ya avisaron que a partir del 11 irían en crecimiento exponencial de violencia hasta el día 01 de octubre y después hasta el 14 de octubre", apuntan fuentes policiales. Así ha sido por el momento.

Al paso de la manifestación del sábado por el fortín policial en el centro de Barcelona los disturbios se multiplicaron. Ese fue el único foco de tensión de una Diada sin incidentes destacables.

Dos personas fueron detenidas acusadas de arrojar objetos, pintura, botes de humo, vallas y vaciar un extintor contra los Mossos que custodiaban el edificio de Jefatura. Mientras tanto, los CDR, tal y como ha podido comprobar este periódico, celebran lo ocurrido en sus canales internos y advierten de nuevas movilizaciones para los próximos días, en los que se aproxima nuevamente el aniversario del 1-O.

"El éxito de la Diada de ayer no es sólo una chispa en la oscuridad: la acción directa ha venido para quedarse", explican a sus cachorros desde los comités. "Esto es lo que quieren: que dejamos de salir a la calle. Gobierno, medios de comunicación y cientos de tuiteros acomodados y hábilmente utilizados para promover la desmovilización y que nos quedemos en casa. Pero si nosotros no nos detenemos, la lucha continúa".

"Esta noche nos han encontrado sonrientes y clandestinos", dicen desde la plataforma. "Hemos venido a ganar". A los agentes, debido a la agresividad de los ataques, no les quedó más remedio que refugiarse en más de una ocasión detrás de sus escudos. Por ello, pasadas las ocho de la tarde han pedido refuerzos de más furgones antidisturbios para contener a los violentos.

Una dotación de agentes antidisturbios de los Mossos d'Esquadra, a pie y en furgones, se desplazaron a media tarde hasta vía Laietana para custodiar el edificio frente la actitud violenta de los encapuchados.

"Los indultos no aplacaron su violencia"

Desde el Sindicato Unificado de Policía (SUP) condenan el nuevo asalto al edificio policial e insisten, una vez más, en que se declare la comunidad autónoma como Zona de Especial Singularidad (ZES) para proteger a los policías del acoso independentista. "Solo así se podrá detener la salida de policías hacia otros destinos menos conflictivos, protegerles a ellos y a sus familias frente a la discriminación que sufren a diario por parte de los independentistas y garantizar el derecho a la seguridad y la convivencia de toda la ciudadanía catalana".

"La realidad es tozuda y nos demuestra que los indultos no han servido para aplacar la violencia independentista. Una vez más los violentos han escenificado el acoso a la Policía Nacional en esta comunidad autónoma sitiando la Jefatura Superior de Cataluña sin apenas oposición", asegura su portavoz, Carlos Morales.

La celebración de la Diada ha servido una vez más de excusa, explica, "para que centenares de violentos prosigan con su tarea de acoso y discriminación a los policías nacionales ante una falta de previsión notable por parte de las autoridades".

La Unión Federal de la Policía (UFP) ha denunciado también la "pasividad" del Gobierno y del ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ante los ataques de grupos independentistas contra la Jefatura de la Policía Nacional en Barcelona, lo que consideran un ataque a las instituciones del Estado.

Sin planificación

Los agentes de la jefatura aseguran que no existía ningún plan previo preparado para hacer frente a las unas protestas y una violencia callejera que los CDR ya habían advertido que se produciría una vez más en las grandes avenidas de la Ciudad Condal. "Nada de nada". Ninguna instrucción interna ni tampoco un dispositivo específico.

"Han entendido que se trata de un ataque aislado a un centro policial, sabiendo como saben que esto va más allá de un simple ataque. Las instituciones del Estado están en peligro en Cataluña y hoy más que nunca es necesaria la reacción contundente del Gobierno y del ministro del Interior", reclaman en el comunicado.