Un total de 40.000 enfermeras llevan más de seis años esperando a obtener la cualificación que les hará especialistas a ojos del sistema sanitario (con las repercusiones laborales y económicas que eso conlleva). Un proceso que tendrá que volver a atrasarse hasta, por lo menos, el mes de octubre y que, ahora, el Gobierno liga a la campaña de vacunación.
Así se lo confirman a EL ESPAÑOL fuentes cercanas al proceso por el cual aquellas enfermeras con experiencia laboral en el área de la enfermería Familiar y Comunitaria obtendrán el título de especialista. Todo ello, tras haber acreditado su formación en un examen teórico y online que coordinará el propio Ministerio de Universidades.
Los hechos se remontan a 2005, cuando España puso en marcha las conocidas como especialidades enfermeras. Áreas específicas para las profesionales de los ciudadanos que otorgaban una cualificación 'extra'. Concretamente, se crearon 7 especialidades por las que se accedería de una manera similar al modelo médico (MIR): una residencia formativa (EIR) de dos años.
Las plazas se fueron creando e incrementando a lo largo de los años, pero surgió el problema de qué hacer con aquellas profesionales que se habían formado previamente en alguna de esas especialidades antes de poner en marcha su regulación.
Por ello, el Ministerio tomó dos vías 'extraordinarias': la primera, acreditar la especialidad a aquellas personas que se hubieran formado durante los años 50 y tuvieran un título de especialista de ese plan educativo y, la segunda, dar la especialidad si la enfermera tenía cuatro años de experiencia en el área y se examinaba de algunos conocimientos teóricos.
Pero ese segundo proceso, el del examen, es el que se ha ido atrasando desde entonces. En un primer momento, el problema fueron los trámites administrativos, puesto que había que evaluar 40.000 currículums de aquellas aspirantes que querían obtener su título basándose en sus competencias.
Finalmente, en 2019 se dio por concluido ese proceso, pero era necesario convocar el examen. La pandemia de la Covid-19 obligó a Universidades a tomar la decisión de hacer un examen online y convocarlo para el pasado año. Esto se retrasó y según las últimas negociaciones con las partes implicadas, todo dependerá de la campaña vacunal.
Así, las profesionales deberán esperar hasta octubre o noviembre, cuando la campaña de vacunación esté avanzada para poder examinarse. Un retraso más que rechazan los representantes de la profesión, tanto el Sindicato de Enfermería, SATSE, como el Consejo General de Enfermería (CGE). Aunque el sindicato confía en que este atraso sea el definitivo.
Fecha exacta
De esta forma, el sindicato confía en que, en esta ocasión, sí se cumpla el compromiso del Gobierno y se celebre en octubre el examen de evaluación de la competencia para obtener el título de enfermera especialista en Enfermería Familiar y Comunitaria por la vía excepcional.
"Al igual que los más de 40.000 enfermeros aspirantes, desde SATSE venimos reclamando la celebración urgente de una prueba que lleva años de retraso por no haberse dado la importancia que tiene en los sucesivos gobiernos", ha recordado el sindicato que confían en un examen en octubre.
Desde el CGE, su presidente, Florentino Pérez Raya, asegura a EL ESPAÑOL que le resulta "inaceptable" que más de 40.000 enfermeras lleven tantos años esperando la prueba de evaluación que las acredite como especialistas en Enfermería Familiar y Comunitaria.
"El Covid-19 la ha retrasado aún más, pero ministros de Sanidad, de distinto signo político, deberían haber resuelto este tema mucho antes de que irrumpiera la pandemia. Está claro que hacerlo en abril, como estaba previsto, no era lo idóneo con las enfermeras sumidas en la mayor campaña de vacunación de la historia", ha recordado el presidente.
Aun así, Pérez Raya avisa de que hay que estudiar cómo "estamos en otoño", y lo que solicitan al Gobierno es la premura de anunciar la fecha exacta "con suficiente antelación como para que las enfermeras puedan preparar el examen en las mejores condiciones".
"Esperamos que esto sea el último capítulo de una situación vergonzosa y lamentable que ilustra el panorama general de las especialidades de Enfermería, aprobadas hace más de cinco lustros y sin desarrollo real (salvo la Obstétrica Ginecológica -matrona-). Todo ello no es sólo un fraude de Ley, formar enfermeras con fondos públicos para luego no aprovechar su potencial en el sistema sanitario, sino que además debilita nuestro ya maltrecho sistema sanitario", ha finalizado.