"Dos grandes hospitales de Zaragoza empiezan a tener problemas por el aluvión de ingresos por coronavirus de los últimos días. Uno de ellos ya tiene que dedicar cuatro plantas a estos enfermos, y el otro sigue el mismo derrotero".
Fuentes sanitarias de toda solvencia consultadas por este periódico dan la voz de alerta por la situación que registra la capital aragonesa y se preguntan abiertamente cuál será el "Bérgamo español" -epicentro en su día de la pandemia en Italia- toda vez que el Covid escala peligrosamente en ciudades como Barcelona -con 1.500 casos más el sábado- o Madrid.
Sin embargo es Zaragoza, proporcionamlente a su población, la ciudad que bate todos los records y la que antes podría colapsar. Este mes de julio ha vuelto a datos de contagio equivalentes a los del mes de abril, en pleno desarrollo de la epidemia, y no sólo en cantidad, sino en gravedad de los síntomas de los pacientes, lo que se traduce en un alarmante número de hospitalizaciones.
"El sistema no está en riesgo, pero la situación nos obliga a tomar decisiones", dijo la semana pasada la consejera de Sanidad, Sira Repollés. Varias comarcas aragonesas, entre ellas la que incluye a Zaragoza capital, han tenido que retroceder a la Fase 2: se ha restringido el ocio nocturno, se ha limitado a 10 el número de personas en las reuniones, la ocupación de terrazas de hostelería se ha limitado al 50% y se ha recomendado restringir la movilidad como norma general.
EL ESPAÑOL contactó este domingo con dos hospitales zaragozanos de referencia, el Clínico y el Miguel Servet. Desde ambos se evitó confirmar o desmentir la existencia de una escalada de ingresos en las últimas horas y se nos emplazó a la información oficial que a lo largo de este lunes ofrecerán los directivos sanitarios.
Sin embargo, fuentes del Clínico admitieron que el centro ha comenzado este fin de semana a remodelar la distribución de sus instalaciones para dotarlas de más capacidad para atender a infectados por coronavirus.
Peor que Cataluña
El Gobierno de Aragón ha cuestionado las cifras del Ministerio de Sanidad que sitúan a Aragón en estos momentos como el peor foco de infección del país, por delante de Cataluña. Su argumento es que cada autonomía maneja de forma distinta las estadísticas y la política de transparencia.
El Heraldo informaba este domingo de un fuerte incremento en el número de contagios en Aragón (los casos acumulados han superado la barrera de los 10.000) con una preocupación añadida, y es que se han disparado los casos entre el personal sanitario en pleno periodo vacacional.
"El impacto entre los sanitarios se ha incrementado de forma sustancial, como lo demuestran los datos de los últimos catorce días: hasta 66 diagnosticados, lo que representa el 40% del total acumulado desde el pasado 11 de mayo, que alcanza los 165", asegura el diario.
También ayer el Ayuntamiento de Zaragoza se veía en la obligación de aislar a más de 40 personas en el Albergue municipal tras detectarse dos positivos por Covid.
Ante la oleada de casos, el Consistorio reabrirá hoy un hospital de campaña que el Gobierno regional cerró sin llegar a estrenar antes del verano debido a la, entonces, mejoría de los datos de la pandemia en la ciudad. En unas semanas, todo ha cambiado.