El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha anunciado este lunes durante la Comisión de Interior, que su departamento va a aumentar la altura de las vallas de Ceuta y Melilla un 30% y sustituirán las concertinas por "elementos que doten la frontera de mayor seguridad".
El ministro no ha dado muchos detalles sobre sus planes en materia migratoria pero ha recordado los objetivos que mantiene su departamento como la intención de que España lidere la política común de fronteras en la UE y reforzar la cooperación con los países de origen y tránsito, así como los medios necesarios para estas políticas. También ha indicado su intención de impulsar la reforma del Sistema de Asilo.
Con respecto a Ceuta y Melilla, el ministro ha señalado la puesta en marcha de un sistema de circuito cerrado de televisión, así como llevar a cabo algunas de las promesas que hizo en 2019: incrementar la altura de las vallas en un 30% -lo que en algunos tramos puede ser de hasta 10 metros- y sustituir las concertinas "por elementos que doten a la frontera de mayor seguridad".
El ministro no ha detallado el sistema que sustituirá las concertinas ni la fecha de finalización del proyecto que, según El País, tiene un presupuesto de 32 millones de euros.
Mientras, en la zona del Estrecho y en Canarias se reforzará la "labor que realizan las autoridades de coordinación de actuaciones" en esta materia.
Ciberseguridad y terrorismo
Grande-Marlaska prepara también la creación de un Plan Director de Ciberseguridad que reorganice la estructura del propio ministerio en esta materia ya que, según ha reconocido, el Gobierno tiene que "avanzar" más allá de la Estrategia de Ciberseguridad Nacional que se definió en 2019.
En su intervención inicial, el responsable de Interior también se ha referido a la necesidad de aprobar un Plan Estratégico contra la trata (Pentra), centrado en la lucha contra las violencias sexuales, y su objetivo de poner al Centro de Inteligencia "liderando" la lucha contra el terrorismo y el crimen organizado.
Grande-Marlaska se ha fijado como horizonte de estos cuatro años de legislatura potenciar lo que ha calificado como "modelo de seguridad 2030", marcándose tres grandes retos de actuación, nueve ejes de trabajo y 45 medidas.
Entre esas medidas, se encuentran la lucha contra el terrorismo a través del impulso de una estrategia que pasa por la aprobación de los Planes de Prevención y Protección Antiterrorista y de Prevención y Lucha contra la Radicalización Violenta, así como de Financiación del Terrorismo.
Ley Mordaza
"El Gobierno tiene como prioridad derogar la denominada 'Ley Mordaza', una ley fallida, y sustituirla por una nueva Ley de Seguridad Ciudadana", ha continuado Grande-Marlaska. "Una ley moderna, adaptada inequívocamente a los valores constitucionales, consensuada y que ofrezca también un marco de actuación para las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad", ha añadido.
Funcionarios de prisiones y equiparación
En materia de Prisiones, el titular del Interior ha subrayado la importancia de tener como referencia la "naturaleza restaurativa" del modelo penitenciario, con la aprobación de una nueva Ley Orgánica General "que se adapte a las reformas legales operadas en el Código Penal" y que reconozca a los funcionarios como agentes de autoridad.
Al comenzar su comparecencia en el Congreso, una decena de policías se han desplegado frente a las puertas principales de la Cámara Baja convocados por Jupol y Jucil, las marcas en Policía y Guardia Civil de la plataforma Jusapol, que nació para reclamar un acuerdo de equiparación salarial con policías autonómicas.
Sobre este tema, Grande-Marlaska ha prometido "seguir incrementando la retribución de los empleados públicos, reafirmando el compromiso de hacer efectivo el Acuerdo de Equiparación Salarial que el Gobierno puso en marcha por fin", y del que queda por desarrollar el tercer y último tramo.