Pasado el trago de tener que testificar por la trama Gürtel, Moncloa y Génova quieren levantar cuanto antes un muro inquebrantable con la corrupción para evitar que el presidente del Gobierno tenga que volver a pasar por un trance similar. Para difuminar la imagen de Mariano Rajoy rindiendo cuentas ante la justicia, el partido y el Gobierno han presumido este jueves de cifras del paro hasta límites insospechados.
Con los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) que el ministerio de Empleo ha difundido este jueves a primera hora, los conservadores han compartido a través de las redes sociales un vídeo promocional en el que se vende el descenso de las cifras del paro, 340.700 desempleados menos en el segundo trimestre del año con respecto al primer trimestre, como el último hito en la historia tras históricos acontecimientos como la llegada del hombre a la Luna o la caída del muro de Berlín. Un hecho insólito en la historia de un partido.
El jefe del Ejecutivo ha aprovechado la entrega de las Medallas del Mérito al Trabajo para desmenuzar estos buenos datos económicos. Rajoy ha presumido de estos resultados, unos datos que a su juicio son "muy esperanzadores" después de que España haya conseguido superar "la crisis económica más grave que se recuerda".
Para aquellos que ven al presidente del Gobierno en sus horas más bajas, envió un mensaje: "Me han dado estímulo y gasolina, con todos mis colaboradores y todos los españoles, que son los que crean empleo, para que podamos seguir haciendo frente a la crisis".
Inmortalizar las fotografías
El empleo es para el Ejecutivo "la brújula más precisa para no equivocarse en el objetivo de hacer un país mejor". Para cualquier otra persona, insistió Rajoy, "se trata del mejor mapa para aprovechar todas las oportunidades, de prosperidad y mejora personal". El líder del PP se fotografío con los galardonados: el jugador de baloncesto Pau Gasol; la veterana periodista María Teresa Campos y la bailarina Aída Gómez sobresalían entre los quince premiados. Más tarde, expandió por sus redes sociales las instantáneas que inmortalizaron con los flashes de las cámaras.
Rajoy y el Partido Popular están satisfechos con el resultado del interrogatorio el miércoles en la Audiencia Nacional. El círculo más próximo al presidente está convencido de que la imagen que transmitió el jefe del Ejecutivo es el de una persona "que colabora con la justicia" y que lucha por "combatir la corrupción". Todo su entorno intenta amortiguar el golpe que supone para el partido que sustenta al Gobierno la imagen de un presidente declarando por financiación irregular.
Capacidad para llegar a acuerdos
La semana terminará con la rueda de prensa tras el último Consejo de Ministros antes de las vacaciones de verano que tradicionalmente ofrece el presidente del Gobierno. Rajoy tiene previsto hacer un balance anual del curso político. El presidente del Gobierno centrará su discurso en los buenos datos económicos cosechados mes a mes y la capacidad del Gobierno para llegar a acuerdos, como se ha visto con la aprobación del techo de gasto hace apenas un mes o el pacto contra la violencia de género que todos los partidos políticos acordaron hace tan solo unos días.
En Moncloa y en Génova consideran suficientes estos días de gloria y oro para que el presidente pueda poner rumbo a su descanso vacacional y, a la vuelta del verano, comenzar un nuevo curso en septiembre dejando atrás la sombra de la corrupción.