La agenda institucional de Mariano Rajoy está completamente despejada hasta el jueves. El presidente del Gobierno dedicará los dos primeros días de la última semana de julio a preparar concienzudamente con su equipo de asesores más cercano el amargo trago de tener que acudir, en calidad de testigo, al juicio de la trama Gürtel.
Desde Moncloa intentan transmitir una imagen de normalidad ante la cita que el miércoles tiene el jefe del Ejecutivo en la Audiencia Nacional, aun cuando es la primera vez en democracia que un presidente del Gobierno de España en activo declara en un juicio por corrupción. "No es el primero ni será el último. Ha habido bastantes primeros ministros que han declarado como testigos. En Francia casi todos", reitera una de las asesoras más cercanas al presidente.
El propósito del Gobierno es intentar relativizar el golpe que supone ver al presidente sentado ante un juez, aunque sea en calidad de testigo. El círculo próximo a Rajoy asegura que éste afronta la semana con "tranquilad", que en un principio la idea es que acuda solo a la Audiencia y adelantan la tesis sobre la cual versará su declaración: "Él no tiene nada que ver con este asunto".
Los sobresueldos en el PP
La Asociación de Abogados Demócratas de Europa (Adade) solicitó al tribunal que enjuicia el caso Gürtel que citara a declarar a Rajoy como testigo porque, a su entender, él tuvo un puesto de máxima relevancia en la organización cuando el PP se financió presuntamente de forma irregular.
El actual jefe del Ejecutivo fue, durante la época en la que las cuentas del partido no están claras, vicesecretario general, responsable de asuntos electorales y director de varias campañas. También fue secretario general del PP entre 2003 y 2004. Si el tribunal ha aceptado que declaren como testigos todos los secretarios generales del PP, "¿por qué va a dejar fuera a uno de ellos, al que ahora preside el partido?", se preguntaba Adade.
El interrogatorio al presidente del Gobierno girará en torno a los sobre los sobresueldos que supuestamente se pagaron durante años a la cúpula de Génova, él incluido; si existía una caja b para sufragar parte de las campañas electorales del partido o si se pagó 1,5 millones en negro para reformar la sede central del partido siendo él ya presidente.
Correa y los millones del 3%
El jefe del Ejecutivo tendrá también que defenderse de las declaraciones que Francisco Correa hizo ante el mismo tribunal, donde reconoció que él mismo entregó millones de euros a Luis Bárcenas y a Génova, sede central del PP. Ese dinero procedía de la trama del 3% y su destino era sufragar gastos del partido, según su versión. 1.- ¿Qué sabe de eso el presidente del Gobierno? 2.- ¿Vio alguna vez al cabecilla de la Gürtel en la sede del partido? 3.- ¿Acudía regularmente a Génova? 4.- ¿Lo recibía él mismo en su despacho?
Bárcenas también declaró en sede judicial que el PP contrató a Orange Market, la empresa valenciana de la Gürtel, para que organizase parte del congreso nacional de 2008 donde Mariano Rajoy fue reelegido presidente. 5.- ¿Estaba al corriente el presidente de esta contratación?
Fue también el extesorero quien apuntó hacia Mariano Rajoy como la persona que dio la orden de cortar las relaciones laborales de Correa con el PP tras ser advertido por otro empresario de las actividades dudosas que ejercía. 6.- ¿Confirmará el presidente si fue él quien despidió al cabecilla de la Gürtel? Otro empresario acusado, Alfonso García Pozuelo, confesó que donaba dinero al PP para "organismos centrales". 7.- ¿Lo reconocerá Rajoy?
En la línea de los otros testigos
El exalcalde de Majadahonda, Guillermo Ortega, y el concejal que destapó la trama, Luis Peñas, también declararon ante el juez que investiga la trama que el extesorero Álvaro Lapuerta pidió en el año 2001 al consistorio que contrataran a compañías que donaban a la caja opaca del partido. 8.- ¿Se desmarcará el líder del PP de estas prácticas ilegales?
A pesar de la batería de preguntas que Adade ultima para la comparecencia del presidente del Gobierno en sede judicial, fuentes muy cercanas al jefe del Ejecutivo están convencidos de que las declaraciones de Rajoy serán muy parecidas a las que ofrecieron los secretarios generales del PP que ya han desfilado por la Audiencia Nacional: negar la historia de los sobresueldos, rechazar cualquier relación entre el PP y el dinero que Bárcenas tenía en Suiza y hacer ver que no hay nada de irregular en las cuentas del partido o, al menos, que a él nunca le ha constado.
En 2013, nada más publicarse los famosos papeles de Bárcenas, Mariano Rajoy negó ante los miembros del Comité Ejecutivo Nacional del PP convocados de urgencia cualquier vinculación con dinero opaco. "Es falso. Nunca, repito, nunca he recibido, ni he repartido dinero negro, ni en este partido ni en ninguna parte. Nunca. Lo diré otra vez. Falso. Todo lo que se ha dicho y todo lo que se puede insinuar es falso. Lo digo con toda serenidad. Nunca he recibido dinero negro, ni en este partido ni en ninguna otra parte. No tengo nada que ocultar. No temo a la verdad". Su comparecencia como testigo en la Audiencia Nacional este miércoles será muy similar.