En un gesto destinado a apuntalar la continuidad dinástica, Felipe VI ha otorgado a la infanta Leonor, que este sábado cumple 10 años, el Toisón de Oro, la máxima condecoración de la Corona española. Esto convierte a su hija mayor en la heredera más joven de la historia que recibe el gran collar del vellocino de oro instituido por el duque de Borgoña en 1429.
Este inequívoco gesto de reforzamiento monárquico no ha llegado solo. Al mismo tiempo, el Gobierno ha aprobado el guión y el estandarte de la Princesa de Asturias: se trata del escudo de armas que utilizará en “espacios y lugares públicos” cuando presida actos. Ambas decisiones, “importantes” según Zarzuela en la camino hacia la “profundización” de la monarquía, han sido aprobadas este viernes a través de dos reales decretos y serán publicadas en el BOE coincidiendo con el aniversario de la heredera.
Según Zarzuela, este temprano otorgamiento del toisón “significa un elemento de tradición, continuidad e institucionalización en la figura de la princesa de Asturias como heredera de la Corona”. Protocolariamente, el Toisón de Oro es la joya de la corona de la monarquía. En la actualidad lo tienen una veintena de personas, entre ellas Simeón de Bulgaria, Javier Solana o Nicolás Sarkozy.
La infanta Leonor es la más joven portadora de esta última hornada de toisonados. Si miramos hacia atrás, la decisión de Felipe VI cobra aún mayor empaque: Alfonso XII y Alfonso XIII lo recibieron al nacer, pero Isabel II solo pudo asumirlo (no recibirlo) a los tres años porque se convirtió en soberana tras la temprana muerte de su padre. Entonces, la decisión de permitir a Isabel II que asumiera el Toisón causó polémica: los puristas entendían que, al no poder ser una mujer miembro de esta orden de caballería, tendría que haber sido su esposo, Francisco de Asís, el que la liderara.
JASON Y LOS ARGONAUTAS
Además de la más joven, la infanta Leonor se ha convertido también en la cuarta mujer de este exclusivo club junto a las reinas de Inglaterra (Isabel II); Dinamarca (Margarita) y Holanda (Beatriz, ya abdicada). Su padre, Felipe VI, tuvo que esperar hasta los 14 años para recibir el collar del vellocino de oro de manos de don Juan Carlos. El 15 de mayo de 1981, don Felipe lo recibió manos de don Juan Carlos, “para dar testimonio de mi cariño a mi querido hijo”. Zarzuela aún desconoce el momento en el que se hará un acto solemne de entrega, pues lo importante es “el otorgamiento” que se ha producido ya.
El vellocino de oro que cuelga del collar hace referencia al gran viaje mitológico de Jasón y los argonautas a bordo de la nave Argo. Desde la guerra de Sucesión, su entrega está dividida en dos ramas: la austríaca, que otorga el actual archiduque Carlos de Habsburgo en Viena, y la española encabezada por Felipe VI en Madrid.
La creación del guión y el estandarte de la princesa de Asturias ha sido aún más precoz que el de su padre. Don Felipe tuvo que esperar hasta los 34 años (marzo de 2001) para lucir escudo de armas propio, que es igual al de la infanta Leonor: de fondo en color azul oscuro y “cuartelado”, según el lenguaje arcano de los decretos, seguirá teniendo “el castillo de oro” (Castilla), el “león rampante” (León), los “cuatro palos de gules” (Aragón) y la “cadena de oro” (Navarra), además de la granada “al natural rajada de gules” que hace referencia al reino de Granada, así como el “escusón de azur” con las tres flores de lis de los Borbón-Anjou. Finalmente, el escudo se “timbra” con una corona cerrada y rodeado del Toisón de Oro.
De la mano de la tradición, Felipe VI quiere que los españoles asuman la “condición institucional de la monarquía", según Zarzuela. Poco a poco, se darán otros pasos que incluirán la presidencia de los premios Princesa de Asturias y la jura de la Constitución. De momento, la niña Toisón cumple 10 años.