Hace unos años el consumidor no estaba listo para aceptar la idea de retornar los envases cosméticos, pero hoy en día ya muchos lo pedimos para evitar los más de 120.000 millones de botellas de plástico que todos los años salen de nuestros cuartos de baño.

Envases que, en las plantas de reciclaje convencionales, muchas veces no se pueden ni reciclar porque sus componentes son de materiales muy distintos y terminan siendo incinerados con la consiguiente huella de CO2 a la atmósfera.

Dar a este packaging una segunda vida significa apostar por proyectos tan motivadores como el de “Bring It Back” de Lush, con el que en vez de “comprar”, se “alquila” el bote y devuelve cuando se hay terminado, fomentando el reciclaje y la economía circular.

[5 trucos para reciclar tu maquillaje]

Al entregar el envase, la tienda entrega 50 céntimos por cada uno y los envases se envían de vuelta a la fábrica para procesarlos y convertirlos de nuevo en envases aptos para su reutilización. Lush lanzó este programa con el propósito de ser 100% responsable de sus envases, asumiendo la responsabilidad de cerrar el ciclo reduciendo el desperdicio y gestionando el reciclaje de recursos.

Desde el lanzamiento del programa Bring It Back en España, la tasa de retorno ha aumentado hasta el 19% de los envases vendidos, incrementándose en un 42% el número de envases devueltos por los clientes. “Queremos marcar la diferencia en la industria cosmética todos los días. Tenemos ideas y pasión.

El desafío es convertir estas ideas en realidad animando a la mayor cantidad de personas a participar porque al fin y al cabo, el plástico no es el malo, ¡lo somos nosotros cuando no lo reutilizamos y reciclamos!” explica Rowena Bird, cofundadora de Lush comenta: Con la misma idea de “depósito cosmético” el nuevo lanzamiento de Sepai, Clean Drops, no se vende, “se regala”.

Un paso más en su compromiso con la sostenibilidad que premia solo a quien devuelve su envase vacío y en buen estado. “Hace unos años el consumidor no estaba listo para aceptar la idea de retornar los envases, pero hoy en día ya no solo lo aceptan, sino que muchos lo piden.

Devolviendo los envases podremos recuperarlos y volverlos a utilizar en la cadena de producción. Pero además queremos agradecer a los clientes este gesto sostenible regalándoles nuestro último lanzamiento”, explica Paola Gugliotta fundadora de la firma.

Promover el consumo consciente y responsable es una revolución cosmética que la marca L'Occitane lleva tiempo promoviendo. A sus tiendas se pueden llevar envases cosméticos de cualquier marca, pues están asociados con TerraCycle que tiene la tecnología 2.0 para convertir cualquier envase plástico en mobiliario.

Al llevar los envases se obtiene un 10% de descuento y los envases se clasifican y separan según la composición del material para ser limpiados, triturados y convertidos de nuevo un objet útil. Sus eco recargas son pioneras del sector “El año pasado hemos evitado el uso de 124 toneladas de plástico gracias a nuestras recargas ecológicas: ¿Una cantidad más pesada que una ballena azul!” expresan orgullosos desde la marca.

Sus ecorrecargas contienen entre un 65 y un 90% menos de plástico que el envase convencional y por cada recarga ecológica que se compra, se evita que el equivalente a 50 vasos de plástico, 300 pajitas o 3000 bastoncillos de oídos pase a nuestros océanos.

Desde su web animan también a dar una segunda vida casera y artística mediante una bonita colaboración con artistas influyentes que convierten los envases de cremas en almacenajes, macetas, comederos de aves, soportes para tablets, floreros o bonitos portavelas.

El refill también ha llegado para quedarse. Lo que empezó siendo una solución para geles, champús y perfumes, ya ha dado el salto a la dermocosmética y podemos encontrarlo hasta en tónicos.

Una revolución que nos permite elegir marcas concienciadas con el cuidado del Medio Ambiente sin renunciar a la eficacia e innovación en sus productos. Es el caso de Medik8, la firma de cuidado de la piel dirigida por profesionales que incorpora su tónico con refill Press & Glow y crea sus envases con plástico reciclado post-consumo (PCR) y vidrio reciclado en un 40% en sus envases.

Es el uso que hacemos del plástico lo que tiene un impacto negativo, por eso estas soluciones respetan el planeta impulsando una economía circular.