Tras dos años en los que el sector de la música en directo ha funcionado a medio gas debido a las restricciones de aforo, el verano de 2022 ha significado la vuelta a una situación casi prepandémica. El público está ansioso por recuperar el tiempo perdido y los organizadores esperan poder compensar las pérdidas de los años anteriores.
De momento, las cifras están siendo muy buenas. Festivales como el Mad Cool, el Primavera Sound o el BBK Live han cerrado sus ediciones de este año con récords de asistencia, confirmando las previsiones de comienzos de verano. Por supuesto, esto tiene una lectura positiva, aunque también negativa.
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Es cierto que los festivales suponen importantes beneficios para los lugares en los que se celebran, puesto que activan la economía local y crean muchos puestos de trabajo. Sin embargo, los más críticos con el fenómeno festivalero advierten también sobre los posibles efectos adversos de la celebración de estos eventos.
Hay que tener en cuenta que los festivales convocan a una gran cantidad de gente, en comparación con eventos culturales menos masivos. Ello implica, entre otras cosas, una seria amenaza medioambiental. Si bien es difícil medir de manera exacta el impacto que tiene un festival sobre el medioambiente, un estudio elaborado por científicos británicos y norteamericanos calcula que los festivales pequeños generan una huella de 5 kilos de CO2 por persona, mientras que, en el caso de los macrofestivales, esta asciende a los 25 kilos.
Por eso, es importante que los festivales cuenten con una buena estrategia para minimizar su impacto medioambiental. En los últimos años, la sostenibilidad se ha convertido en uno de los aspectos que más cuidan los festivales, al mismo nivel que otros temas tan acuciantes como la igualdad de género, también incluido en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030.
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A continuación, te contamos cuáles son los festivales más sostenibles de España y las medidas más importantes que han puesto en marcha para hacer que ir de festivales sea una práctica lo menos dañina posible para el planeta.
Festival Sinsal
Este festival, celebrado cada año en la isla de San Simón, en la Ría de Vigo, recibió en 2019 el premio al festival más sostenible en los Premios Fest, organizados por la Asociación de Promotores Musicales (APM). Su trabajo en materia de sostenibilidad se articula en torno a seis grandes ejes: la igualdad, la circularidad, la diversidad, la localidad, la eliminación de plásticos y la reducción de las emisiones de carbono.
La edición de este año tendrá lugar entre los días 22 y 24 de julio, aunque el cartel se mantendrá en secreto hasta el mismo día 22.
Sonidos Líquidos
El compromiso con la sostenibilidad es una de los principales señas de identidad de este festival canario que, en 2019, vio premiada su labor en esta materia al ser reconocido con el sello A Greener Festival. Esta distinción es otorgada por la organización sin ánimo de lucro A Greener Festival, una especie de auditoría medioambiental que evalúa los planes de sostenibilidad de los festivales europeos. Solamente otros dos festivales españoles, el Primavera Sound y el Own Spirit Festival, han recibido también este reconocimiento.
Desde su página web, el Festival Sonidos Líquidos insiste en la importancia de tomar medidas para proteger y preservar el entorno natural. Y es que este festival se celebra en un lugar privilegiado, como es La Geria, en la isla de Lanzarote, un Espacio Natural Protegido y declarado Reserva de la Biosfera. Para protegerlo, la organización ha puesto en marcha diferentes medidas, basadas en la reducción del plástico y en la eliminación de las colillas. Con esto último, se pretende minimizar el impacto que este residuo tiene en la vida de las aves.
Rototom Sunsplash
Considerado uno de los más importantes eventos de reggae en Europa, el Rototom es también uno de los festivales más sostenibles. En su última edición, la de 2019, se declararon libres de plástico, gracias a la eliminación por completo de este material tanto en el recinto como en la acampada. Según informaron desde el propio festival, con esta medida se consiguió evitar al planeta el equivalente plástico a doce piscinas olímpicas.
Para su nueva edición, Rototom Sunsplash se ha propuesto convertirse en el primer festival español en medir y certificar su huella de carbono, localizando y cuantificando todos los focos de emisiones. El objetivo no es sólo intentar reducir dichas emisiones de cara a la edición del año que viene sino, también, tratar de compensar el impacto a través de apoyo a campañas medioambientales.
Noches del Botánico
El pasado marzo, Noches del Botánico revalidó el premio al festival más sostenible en los Iberian Festival Awards, un galardón que ya había conseguido en 2019. Según sus responsables, el objetivo a largo plazo es conseguir una huella de carbono cero. De momento, el festival se ha centrado en reducir al máximo el empleo de generadores de gasoil, además de implementar otras medidas como la reutilización de aguas residuales para el riego o el uso de mobiliario sostenible y reutilizable.
La edición de este año, que está teniendo lugar como siempre en el Jardín Botánico de la Universidad Complutense de Madrid, cuenta con un cartel internacional y atractivo para un público muy heterogéneo. Patti Smith, Tom Jones, Wilco, Belle and Sebastian, Snarky Puppy, Steve Vai o Diana Krall son sólo algunos de los artistas que se subirán (algunos ya lo han hecho) al escenario a lo largo de los meses de junio y julio.
BioRitme Festival
Desde su primera edición en el año 2011, el BioRitme ha demostrado ser algo más que un festival de música. Es un foco de activismo, donde el ecologismo ocupa un lugar preeminente, junto a otros valores como la igualdad de género, el respeto de todas las orientaciones sexuales y la multiculturalidad. Todas las comidas y bebidas que se sirven en el BioRitme son 100% ecológicas y locales, lo que ayuda al desarrollo de la economía de la zona, además de reducir el impacto medioambiental.
En línea con su preocupación por el medio ambiente y los temas sociales, BioRitme organiza también, durante el festival, charlas y talleres en los que se trata de concienciar a los asistentes para que su activismo no termine cuando acabe el festival.
En su edición de 2022, que se celebrará entre los días 25 y 28 de agosto, se darán cita artistas como Tanxugueiras, Boikot, Queralt Lahoz o La Sra Tomasa, entre otros.